(ANSA) - ROMA, 26 APR - (Ampliada)
Frosinone volvió a ganar hoy después de tres meses, salió
provisoriamente de la zona de descenso y despidió de la máxima
categoría a su rival de turno: la colista Salernitana, que cayó
por 3-0 como visitante en el inicio de la trigésimo cuarta fecha
y quedó matemáticamente condenada.
El argentino Matías Soulé, de penal a los 10', celebró su
undécimo gol en el campenato que lo confirma como artillero del
equipo de Eusebio Di Francesco, que estiró la ventaja a los 25'
por intermedio de Marco Brescianini y sentenció el pleito a los
85' con un gol de Nadir Zortea.
Tres puntos de oro en su lucha por la permanencia que se
celebraron como un título en el estadio Benito Stirpe, escenario
en el que Frosinone había logrado su última victoria hasta hoy
el 21 de enero al derrotar a Cagliari por 3-1 en la vigésimo
primera fecha, única en los últimos 19 partidos que disputó.
Frosinone, cuya buena primera ronda del campeonato contrastó con
la merma que mostró en la segunda, dejó el antepenúltimo puesto
que compartía con Udinese (que tenía mejor diferencia de gol y
que perdió frente a la Roma al completarse el jueves los minutos
que quedaban pendientes de ese duelo) e iguala ahora la línea de
Empoli y Hellas Verona, ambos con 31 puntos también, pero con un
partido menos.
Salernitana, a la que hoy le anularon un gol en cada tiempo (por
posición adelantada y por una falta previa, en cada caso) cierra
las posiciones con sólo 15 unidades cosechadas en 34 partidos en
los que apenas celebró dos triunfos y hoy sumó su vigésimo
tercera derrota.
Un botín demasiado magro como para soñar con repetir el
"milagro" de la permanencia, como el que sucedió en la recta
final del pasado torneo cuando la entrenaba Davide Nicola (hoy
al frente del Empoli), y que la condena a jugar la próxima
temporada en la Serie B.
Con 26 unidades, se mantiene en el penúltimo puesto Sassuolo,
que el domingo visitará a Fiorentina en el Artemio Franchi y
marcha a dos puntos de distancia de Udinese, rival del
encumbrado Bologna ese mismo día en el Renato Dall'Ara que hoy
quedó en zona de descenso junto con el "verdinegro".
Respira Frosinone, al menos por un rato, que despidió de la
máxima categoría al equipo de Stefano Colantuono, tercero que
intentó sin suerte enderezar el rumbo de una Salernitana que no
había podido hacerlo con Filippo Inzaghi, ni con Fabio Liverani.
Cuatro fechas le quedan al equipo de Salerno en primera
división, nada menos que ante Atalanta, Juventus, Hellas Verona
y Milan, en ese orden, antes de despedirse de la elite del
"Calcio", en la que por primera vez había jugado dos temporadas
seguidas y militó en cuatro ocasiones.
"Dependemos de nosotros mismos", advertía Di Francesco en la
previa al apuntar a las opciones de Frosinone de lograr la
permanencia en primera división, a la que ascendió en esta
temporada y en la que ya había jugado en 2015-16 y 2018-19.
Celebran sus aficionados y celebran también los argentinos Soulé
y Enzo Barrenechea, titulares hoy en el equipo local al igual
que su compatriota Federico Fazio, que jugó desde el inicio en
Salernitana y estuvo a punto de darle al menos el gol del honor
de cabeza en tiempo de descuento, pero no pudo ser.
Apenas dos aficionados del equipo visitante (que no contó con el
lesionado arquero mexicano Guillermo "Memo" Ochoa) dijeron
presentes hoy en el Benito Stirpe, cerrado para los aficionados
residentes en Campania.
La valla de Salernitana volvió a ocuparla el francés Benoit
Costil, quien a los 4' tuvo su primer sobresalto con un remate a
colocar de Soulé que logró despejar al tiro de esquina. Otros
seis minutos pasaron para que Frosinone abriera el marcador.
Y fue tras una habilitación de Zortea buscando a Emmanuele
Valeri, quien fue bloqueado por el francés Junior Sambia en el
área, falta que el árbitro Francesco Fourneau no dudó en
sancionar y le dio la posibilidad a Soulé de reivindicarse tras
aquel penal fallado en el empate con Napoli (2-2 en la trigésimo
segunda fecha).
El argentino volvió a gritar un gol y cortó un "ayuno" de diez
partidos, en un duelo en el que Salernitana intentó responder
golpe por golpe, pero recibió el segundo a los 25' en un
contragolpe comandado por Valeri y por al ítalo-marroquí Walid
Cheddira que Brescianini trocó por el 2-0.
Parecía ser el de nocaut para el visitante, que a los 38' achicó
distancias con Emanuel Vignato, pero en posición adelantada que
obligó a Forneau a invalidar la conquista, por lo que los
equipos se fueron al descanso con el marcador tal como estaba
hasta entonces.
En el complemento, Stefano Turati dejó la valla de Frosinone
debido a un corte en la mano derecha y el equipo de Di Francesco
intentó bajarle el ritmo a las acciones ante un rival que salió
con desesperación en busca del descuento.
Todavía lo celebraba el nigeriano Charles Chukwubuikem Ikwuemesi
a los 50' cuando el árbitro también lo invalidó, esta vez por
una falta previa de Fazio sobre el español Pol Lirola en un tiro
de esquina en favor de la visita, que reclamó una falta contra
Ikwuemesi a los 60' Caleb Okoli en el área que Forneau saldó con
un tiro libre en favor del local.
El ingresado francés Iron Gomis dilapidó a los 76' otra chance
de Salernitana para achicar distancias y Zortea refrendó el
dicho que indica que los goles que se fallan en un arco se
padecen en el otro, cuando a los 85' sentenció el duelo y el
destino del equipo de Colantuono al decretar el 3-0 definitivo.
Frosinone respira y celebra junto con los cerca de 15 mil
aficionados que se dieron cita en el estadio hoy y despidieron
con aplausos al equipo. Sin pena, ni gloria se despide
Salernitana de primera división después de tres temporadas luego
de un torneo en el que ninguna fórmula pareció funcionar.
(ANSA).