(ANSA) - SANTIAGO DE CHILE, 26 APR - La Fiscalía Regional de
Antofagasta solicitó la extradición a Chile de un ciudadano
italiano, luego de que se incautaran casi mil ejemplares de
cactus chileno, originario del Desierto de Atacama, que iban a
ser sacados ilegalmente desde el país.
El coleccionista y contrabandista -cuyo nombre no fue
informado- comercializaba los ejemplares a altos valores entre
una red de compradores en Europa y Asia.
La acción policial se conoció como "Operación Atacama",
aludiendo al origen de las especies requisadas, que solo se
encuentran en el extremo norte chileno, específicamente en una
pequeña franja costera entre las regiones de Antofagasta y
Atacama.
Según la investigación realizada por la Fiscalía y la
Policía Civil de Investigaciones (PDI), entre 2013 y 2019, el
italiano realizó siete viajes a Taltal, donde extrajo,
fotografió y referenció, sin contar con autorización alguna, 964
ejemplares chilenos de la variedad Copiapoa, pertenecientes a
los géneros Copiapoa (876 ejemplares), Eriosyce (79) y Copiapoa
superba (89), avaluadas en la suma aproximada de 1 millón de
dólares.
Para sacar las plantas del país, el imputado realizó en la
misma época 48 envíos postales desde la sucursal de Correos de
Chile de Taltal, dirigidas a sujetos en Grecia y Rumania,
quienes redirigían los envíos a su domicilio en Italia, donde
las especies eran comercializadas ilegalmente a al menos 11
traficantes y coleccionistas de distintas nacionalidades y siete
coleccionistas italianos.
En febrero de 2020 la Policía Italiana incautó casi mil
ejemplares de cactus chileno, originario del Desierto de
Atacama, en un domicilio de la ciudad de Senigallia, informó el
diario La Tercera.
El fiscal (s) de Taltal, Mauro Osses, explicó que la
investigación del caso comenzó en la Fiscalía Metropolitana
Centro Norte a través de una denuncia presentada por la
Corporación Nacional Forestal de Chile (Conaf) tras los
allanamientos en Italia, pero posteriormente se trasladó a
Taltal, por ser el lugar donde se cometió el delito.
"Durante la investigación rastreamos los movimientos que
había tenido el imputado, sus ingresos y salidas del país, y
logramos determinar que esta persona viajaba regularmente a
Taltal, donde solía quedarse 10 o 15 días, periodo en el cual
extraía las especies y las enviaba a colaboradores que tenía en
Grecia y Rumania, donde la importación de estas especies es más
laxa, para luego hacerlas llegar a su domicilio en Italia",
expuso.
En el fallo que concede la extradición, la Corte de
Apelaciones dispone enviar copia de los antecedentes al
Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, pidiendo que se
practiquen las gestiones diplomáticas necesarias para que
Italia, otorgue la extradición. Además, se pide al Ministerio
que solicite a Italia "la medida cautelar personal que proceda
en el ordenamiento jurídico del respectivo Estado, a fin de
evitar la fuga del imputado, mientras se ejecuta el proceso de
extradición". (ANSA).