(ANSA) - CIUDAD DEL VATICANO, 26 APR - El Papa, de 87 años,
hombre perteneciente a la generación que le cuesta mucho usar el
celular, comprendió que las nuevas tecnologías son la nueva
frontera: no deben asustar pero sí deben estar ligadas a los
principios, los valores, a una ética.
Instrumentos al servicio de la paz, para promover la
dignidad de todos, para apoyar a los estratos más vulnerables,
de los jóvenes a los detenidos, de los pobres a los migrantes.
Por este motivo, con un planeta que lucha con "la tercera
guerra mundial por partes", devastado por la pobreza e
injusticias, el papa Francisco decidió dedicar los principales
documentos de este 2024 justamente a la Inteligencia Artificial
(IA).
Es, en efecto, el tema tanto del Mensaje para la Paz del 1
de enero como del Mensaje por la Jornada de las Comunicaciones
Sociales, siempre de enero de este año.
Pero el tema resurge siempre más frecuentemente en
audiencias y encuentros privados. El último, esta semana, con el
CEO de Cisco, Chuck Robbins. Y el Papa en estos años quiso
confrontar personalmente con Elon Musk o Tim Cook, por dar
ejemplos.
Entre las preocupaciones de Francisco figura siempre la de
construir caminos de paz y, por ello, solicita, en el Mensaje
para la Jornada de la Paz 2024, que las nuevas tecnologías no
sean utilizadas para alimentar "la locura de la guerra".
"No podemos ignorar la posibilidad de que armas sofisticadas
terminen en las manos equivocadas, facilitando, por ejemplo,
ataques terroristas o intervenciones tendientes a desestabilizar
instituciones legítimas de gobierno, el mundo, en suma no
necesita que las nuevas tecnologías -subraya el Papa-
contribuyan al injusto desarrollo del mercado y del comercio de
las armas, y promuevan la locura de la guerra".
Y entonces la Inteligencia Artificial puede, al contrario,
"pavimentar los caminos de la paz".
El papa Francisco -como escribía en X el 1 de enero- sueña
que "las nuevas tecnologías estén al servicio de la familia
humana y ayuden a construir recorridos de fraternidad".
El ética, o mejor, el "algoritmo", como la llama el
Vaticano, es además garantía de democracia. "Es imprescindible
preventivamente, proponer modelos de regulación ética para
frenar los aspectos dañiños y dscriminatorios, socialmente
injustos, de los sistemas de inteligencia artificial y para
contrarrestar su utlización en la reducción del pluralismo, en
la polarización de la opinión pública o en la construcción de un
pensamiento único", advierte el Papa.
Un mensaje incluso al mundo de la comunicación: "el uso de
la Inteligencia Artificial podrá contribuir positivamente en el
campo de la comunicación, si no
cancela el papel del periodismo en el terreno, sino que, por el
contrario, lo apoyará", dijo el 24 de enero pasado, Día de San
Francisco de Sales, patrón de los periodistas. (ANSA).