(ANSA) - MONZA, 02 MAR - Que la llegada de Daniele De Rossi
como entrenador le cambió el ánimo a la Roma ya no hay quien lo
dude, pero ni siquiera la sexta victoria en siete partidos desde
que asumió como reemplazante del portugués José Mourinho bastó
para que el "giallorosso" se meta en zona de clasificación a la
próxima Champions.
Un objetivo con el que sueñan sus hinchas y también jugadores,
cuerpo técnico y dirigentes, que parece más cercano luego de la
goleada por 4-1 obtenida hoy en la visita al Monza que dejó a la
Roma en el quinto puesto, entreverada entre Bologna y Atalanta,
rivales mañana en un mano a mano directo por el cuarto que hoy
ocupa el "azulgrana" de Thiago Motta.
"No estamos cerca de lograr el objetivo. Faltan muchos partidos
todavía", afirmó pese a todo De Rossi al aludir a las 11 fechas
que le restan por jugar a su equipo en el campeonato y aún
cuando reconoce que la victoria de hoy sirvió para "acortar
distancias".
"En este tiempo que llevo transcurrido como entrenador de la
Roma, conocí mejor a los jugadores y ellos me conocieron más a
mí. Hemos hecho un buen trabajo, pero estamos todavía a mitad de
camino", destacó al afirmar entre risas que "hoy volvimos a
ganar, pero siempre estamos quintos" en la tabla.
Su colega Raffaele Palladino, entrenador del Monza, supo
compartir con De Rossi los estudios cuando ambos cursaban sus
carreras como DT y destacó hoy: "A Daniele le anticipé que algún
día iba a entrenar a la Roma y me siento feliz de haber acertado
y de que él haya tenido esta oportunidad".
"Debo felicitar a los dirigentes por haber confiado en él porque
con Daniele la Roma se soltó y su mano se nota. No logró
expresar todo su potencial cuando dirigió a Spal (su primera
experiencia en ese rubro, Ndr), pero ahora sí lo está haciendo
con un equipo difícil de predecir y de enfrentar porque rota
permanentemente y ocupa bien los espacios. Antes, era una Roma
más táctica", comparó.
En relación con la dura derrota de Monza, Palladino aseguró:
"Parece paradójico, pero felicité a mis jugadores después del
partido. Hemos generado situaciones que no supimos aprovechar y
por eso fuimos castigados, así como también por los errores
arbitrales, que incidieron aunque preferiría no profundizar en
ese tema", aclaró.
Sin embargo, Palladino enumeró que el primer gol de la Roma,
"nace de una falta no sancionada a favor nuestro", el tercero,
que Dybala convirtió tras una falta que -según el DT de Monza-
"no era tal sobre Bryan Cristante" y el cuarto, en el que hubo
otra infracción previa sobre (Matteo) Pessina que el juez estuvo
dos veces a punto de marcar, pero finalmente no lo hizo".
Un reclamo por elevación al árbitro Marco Piccinini el de
Palladino que resultó bastante más "suave" que el de Claudio
Lotito, presidente de Lazio, tras la derrota frente a Milan del
viernes en el Olímpico en la que su equipo sufrió tres
expulsiones, sancionadas por parte del juez Marco Di Bello, cuya
actuación fue calificada como mal hasta por el designador
arbitral Gianluca Rocchi. (ANSA).