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Por Marcos Romero
(ANSA) ? CIUDAD DE MEXICO, 29 ENE - El virus zika por ahora
constituye un problema menor para México, con apenas 15 casos,
pero se teme que la situación cambie y se vuelva explosiva en
abril próximo, cuando empieza la primavera (boreal) y se inicia
la temporada de calor seguida tres meses después por la lluvia.
El gobierno mexicano se ha abstenido de lanzar una alerta
nacional a causa de este virus, propagado por el mismo mosquito
que transmite la malaria, el dengue y el chikunguña, debido a la
temporada de frío, aunque las cosas podrían cambiar en poco
tiempo cuando se inicie el calor.
El viceministro de Prevención y Promoción de la Salud, Pablo
Kuri, afirmó que el gobierno dispone de fondos por 800 millones
de pesos (unos 50 millones de dólares), más de lo destinado el
año pasado, para lanzar una campaña de fumigación contra el
vector.
Sin embargo, afirmó que esta medida sería insuficiente si la
población no elimina los focos donde se crían los zancudos del
tipo "aedes aegypti".
"Por más que el gobierno en sus tres niveles fumigue y haga
campañas, si no contamos con el apoyo de la ciudadanía para
eliminar los criaderos de mosquitos, no vamos a poder mitigar el
impacto", señaló.
"No podemos evitarlo, pero sí lo podemos mitigar. Necesitamos
el concurso de todo el mundo", agregó el funcionario.
Desde el año pasado, en mensajes difundidos por radio y
televisión el gobierno aconsejó eliminar de patios cacharros,
neumáticos o vasijas donde se acumule el agua para evitar que
los mosquitos se multipliquen, a causa del chikunguña, pero con
el zika se teme que la campaña sea más fuerte.
Kuri evita caer en el alarmismo al señalar que los vínculos
que supuestamente existen entre el virus y los casos de
nacimientos de bebés con microcefalias no están establecidos
todavía científicamente.
"En caso de que se llegase a ver alguna situación distinta se
pueden hacer recomendaciones adicionales que hoy por hoy no se
pueden determinar, porque con lo que se sabe no es suficiente?,
afirma.
El problema del zika radica, a decir de los expertos, en que
sólo una de cuada cuatro personas que se contagian con el virus
desarrolla los síntomas - fiebre no muy elevada, erupciones de
la piel y conjuntivitis, que suelen durar entre 2 y 7 días- lo
que impide tener una contabilidad confiable de los casos.
Además, el virus sólo se puede detectar durante pocos días en
la sangre de personas infectadas pero si las pruebas se realizan
después de este período fácilmente se confunde con el del dengue
o el chikunguña.
México registra actualmente 21.201 casos de dengue, de los
cuales 5.464, es decir, la cuarta parte, corresponde a su
variante más grave, que es la de tipo "hemorrágico" y
contabiliza 11.577 casos de chikunguña, pero sólo 15 de zika,
más otros tres que corresponden a pacientes que se contagiaron
fuera de México.
A pesar del escepticismo de las autoridades sanitarias sobre
el vínculo entre zika y problemas congénitos, en tres semanas se
prevé una campaña agresiva en medios de comunicación para
recomendar a las embarazadas tomar precauciones.
El objetivo, según Kuri, es "elevar el nivel de conciencia de
que esto, eventualmente, cuando lleguen las lluvias y aumente el
calor, se pueda convertir en un riesgo?.
El gobierno mexicano presume de tener un poderoso aparato de
vigilancia epidemiológica y entomológica para controlar el
vector que transmite el zika que ha construido tras el arribo al
país del dengue y luego el chikunguña.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó ayer a un
comité para analizar la rápida propagación del mosquito que
difunde el zika en Latinoamérica y determinar si amerita lanzar
una emergencia internacional.
Además de microcefalia, un extraño defecto cerebral que
sufren bebés en el vientre materno, podría estar asociados al
virus del zika el llamado síndrome de Guillain Barré, una forma
de parálisis corporal.
La OMS está preocupada por la forma tan rápida en que se está
expandiendo el virus en América Latina, que circula también en
Africa y Asia.
MRM/ACZ
29/01/2016 20:39
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