Por Ernesto Pérez ROMA, 20 (ANSA) - Pocos realizadores como el chileno Pablo Larraín pueden ufanarse de recibir una retrospectiva homenaje con solo cinco largometrajes en su haber en poco más de diez años de carrera y menos de 40 de edad, que cumplirá el 19 de agosto próximo).
    Se lo tributa desde ayer la 10a. Fiesta del Cine de Roma que ha organizado además para el viernes 23 un encuentro con el público antes de la proyección de su último largometraje, "El club", premiado con el Oso de Plata en el Festival de Berlín de febrero pasado, comprado pero aún inédito en Italia, y una conferencia de prensa al día siguiente.
    El homenaje comprende sus largos "Fuga" (2006), "Tony Manero" (2008), "Post Mortem" (2010) y "No" (2012), además del ya citado "El club", que se exhiben en el microcine del MAXXI, el Museo de Arte del siglo XXI, aledaño al Auditorium donde se desarrolla el grueso de la programación de la Fiesta del Cine.
    Mario Sesti, director de la manifestación e inspirador de la iniciativa, alaba de Larraín "la fuerza inquietante de sus historias y la capacidad de usar, con una potencia hasta ahora desconocida, los elementos tradicionales del lenguaje cinematográfico" y declara que "su manera de crear el cine no se parece en nada de lo que se haya hecho hasta ahora en la historia del séptimo arte".
    Y concluye: "La Fiesta del Cine de Roma se siente particularmente orgullosa de ser tal vez la primera manifestación cinematográfica internacional que rinda debido homenaje a un cineasta cuyo arte parece ahondar en las mismas vísceras de la vida con la asombrosa seguridad del bisturí de un prodigioso cirujano". PN/MRZ
20/10/2015 20:27