BUENOS AIRES, 26 (ANSA)- El candidato del oficialista Frente para la Victoria, Daniel Scioli, obtenía el 36,86 por ciento de los votos en las elecciones presidenciales del domingo, en un virtual empate con el opositor postulante de la alianza derechista Cambiemos, Mauricio Macri, que alcanzaba el 34,33 por ciento, escrutados el 97,12 por ciento de los sufragios.
    Al no consagrarse un ganador en primera vuelta, los argentinos elegirán al sucesor de Cristina Fernández de Kirchner en un histórico balotaje -el primero de su historia- el 22 de noviembre próximo.
    En tercer lugar se ubicaba el candidato de la coalición del peronismo disidente Sergio Massa, de Unidos por una Nueva Argentina (UNA), con el 21,34 por ciento.
    Nadie logró superar el 45% que exige la Constitución o el 40% y una diferencia del 10% con su inmediato oponente, por eso el presidente surgirá de una segunda vuelta.
    La oposición de Cambiemos fue la gran sorpresa de estas elecciones, ya que dio un verdadero batacazo al ganar de la mano de María Eugenia Vidal la gobernación de la provincia de Buenos Aires, con el 39,62 por ciento de los votos, quebrando una hegemonía peronista de 28 años. Su derrotado fue el jefe de gabinete de la Nación, Aníbal Fernández, con el 35,04 por ciento Este triunfo opositor en territorio bonaerense adquiere un relieve aun mayor de cara al balotaje ya que allí vota el 37 por ciento del padrón nacional. En la provincia de Buenos Aires se define históricamente la elección, lo que llenó de preocupación al oficialismo y de algarabía a Cambiemos.
    El refrán popular afirma que quien gana en la provincia de Buenos Aires vence el país. Además, Cambiemos venció en varias intendencias bonaerenses, incluso en distritos históricamente dominados por el peronismo.
    En Santa Cruz, la patagónica provincia donde nació el expresidente Néstor Kirchner, triunfó la ministra de Bienestar Social y hermana del fallecido mandatario, Alicia Kirchner. En el Congreso, el "kirchnerismo" ratificó su hegemonía en el Senado, pero sufrió un fuerte retroceso en Diputados, donde perdió el quórum propio.
    "Los argentinos no quieren volver al ajuste, la devaluación y el endeudamiento", afirmó Scioli, en un discurso fuerte de campaña desde su bunker. El domingo por la noche, antes de que se divulgaran los primeros resultados oficiales, Scioli habló de "triunfo" y de "demostración de confianza" del electorado.
    En el búnker de Cambiemos, Macri -una hora y media después del discurso de Scioli- celebró haber alcanzado el balotaje frente al postulante oficialista. "Lo que sucedió hoy cambia la política de este país", afirmó Macri, líder de Propuesta Republicana (PRO), un partido que él mismo fundó, con tendencia de centro derecha y base de la alianza Cambiemos junto a la Unión Cívica Radical (UCR) y la Coalición Cívica. El alcalde de la ciudad de Buenos Aires y ex empresario se desvivió en agradecimientos y también apostó a la segunda vuelta al solicitarle a "los votantes de otras fuerzas, que se sumen" a su propuesta para la segunda vuelta.
    "Se siente, se siente, Mauricio presidente", rugieron sus seguidores, mientras que el candidato conservador prometía "pobreza cero" para el país desde su bunker.
    Además de la elección presidencial, que definirá el reemplazante de Cristina Fernández de Kirchner, se eligió la mitad de la Cámara de Diputados -se presume que el oficialismo se encamina a perder allí el quórum propio- y un tercio del Senado, que según las encuestas seguiría bajo control del FPV.
    También las urnas definían los gobernadores de once provincias (estados) entre ellos la de la populosa provincia de Buenos Aires, hoy gobernada justamente por Scioli. MFI/MRZ
26/10/2015 13:34