Patriarcado Católico Latino pide reducir la tensión

(ANSA) - CIUDAD DEL VATICANO, 07 OTT - "Hacemos un llamado a la comunidad internacional, a los líderes religiosos de la región y de todo el mundo, a que hagan todos los esfuerzos posibles para ayudar a reducir la tensión, restablecer la calma y trabajar para garantizar los derechos fundamentales de las personas en la región", afirma en un comunicado el Patriarcado Católico Latino de Jerusalén tras el ataque de hoy de Hamás a Israel desde la Franja de Gaza.
    "Las declaraciones unilaterales sobre el estatuto de los lugares religiosos y de culto sacuden el sentimiento religioso y alimentan aún más el odio y el extremismo -añade-. Por lo tanto, es importante preservar el status quo en todos los lugares santos de Tierra Santa y en Jerusalén en particular".
    "El ciclo de violencia que ha matado a numerosos palestinos e israelíes en los últimos meses estalló esta mañana, sábado 7 de octubre de 2023", se lee en la declaración, publicada en árabe e inglés en el sitio web del Patriarcado Latino.
    "Hemos sido testigos de una repentina explosión de violencia que es muy preocupante por su extensión e intensidad -continúa-.
    La operación lanzada desde Gaza y la reacción del ejército israelí nos retrotraen a los peores períodos de nuestra historia reciente".
    "Demasiadas víctimas y tragedias con las que tienen que lidiar tanto los palestinos como las familias israelíes crearán más odio y división, y destruirán cada vez más cualquier perspectiva de estabilidad", puntualiza..
    Según el Patriarcado, gobernado por el nuevo cardenal Pierbattista Pizzaballa, "los continuos derramamientos de sangre y las declaraciones de guerra nos recuerdan una vez más la urgente necesidad de encontrar una solución duradera y global al conflicto palestino-israelí en esta tierra, que está llamada a ser una tierra de justicia, paz y reconciliación entre los pueblos".
    Pedimos a Dios que inspire a los líderes mundiales en su intervención para la implementación de la paz y la armonía, para que Jerusalén pueda ser una casa de oración para todos los pueblos", concluye. (ANSA).