Multitudinario encuentro con jóvenes en el Congo

Les pidió evitar la corrupción, las drogas y el aislamiento.

El Papa Francisco en República Democrática del Congo (foto: ANSA)
El Papa Francisco en República Democrática del Congo (foto: ANSA)

(ANSA) - KINSHASA, 02 FEB - El Papa mantuvo hoy en Kinshasa, en la República Democrática del Congo, un multitudinario encuentro con 65 mil jóvenes, a quienes advirtió sobre los riesgos de excluir a los diferentes, de la corrupción y les pidió evitar la brujería.
    En su encuentro con los jóvenes, en el Estadio de los Mártires de Kinshasa, Francisco los invitó a cuidarse de "la tentación de señalar con el dedo a alguien, de excluir a otro porque es de un origen diferente al vuestro".
    Por lo tanto, es necesario distanciarse "del regionalismo, del tribalismo, que parecen fortalecerte en tu grupo y, en cambio, representan la negación de la comunidad. Ya sabes cómo sucede: primero uno cree en los prejuicios contra los demás, luego uno justifica el odio, después llega la violencia y finalmente estamos en medio de la guerra".
    "Claro que es más fácil condenar a alguien que entenderlo, esto pasa en todo el mundo; pero el camino que Dios indica para construir un mundo mejor pasa por el otro, pasa por el todo, pasa por la comunidad", subrayó el Pontífice.
    El Papa pidió a los jóvenes que no dejen que su juventud se arruine "por la soledad y la clausura. Piensen siempre juntos, los unos en los otros, y serán felices, porque la comunidad es la forma de sentir bien con uno mismo, ser fiel a la propia vocación. En cambio, las opciones individualistas parecen tentadoras al principio, pero luego solo dejan un gran vacío interior".
    Francisco puso dos ejemplos: las drogas y la brujería.
    "Piensen en las drogas: te escondes de los demás, de la vida real, para sentirte omnipotente; y al final te encuentras privado de todo. Pero piensa también en la adicción al ocultismo y la brujería, que te encierran en las punzadas del miedo, la venganza y la ira. No se dejen fascinar por falsos paraísos egoístas, construidos sobre las apariencias, sobre el dinero fácil o sobre una religiosidad distorsionada", advirtió.
    El Papa también advirtió a los jóvenes sobre el mundo de las redes sociales: "La virtualidad no es suficiente, no podemos conformarnos con interactuar con personas distantes o incluso falsas. La vida no se puede tocar con un dedo en la pantalla".
    "Es triste ver a los jóvenes que pasan horas frente a un teléfono: después de mirarse en el espejo, miras sus rostros y ves que no sonríen, su mirada se ha vuelto cansada y aburrida.
    Nada ni nadie puede reemplazar la fuerza del todo, la luz de los ojos, la alegría de compartir!", añadió.
    "Hablar, escucharse es esencial, estar juntos es esencial: mientras en la pantalla cada uno busca lo que le interesa, descubran cada día, queridos jóvenes, la belleza de dejarse asombrar con los demás, con sus historias y sus experiencias", fue la invitación del Papa.
    Francisco también invitó a decir sí a la "honestidad" y no a la "corrupción". "Digamos juntos: no a la corrupción", pidió el Papa en francés. Luego mencionó el caso de Floribert Bwana Chui, asesinado hace 15 años en Goma por haber bloqueado el paso de alimentos en mal estado que habrían dañado la salud de las personas.
    "Él pudo haberse hecho a un lado, nadie se habrían enterado y habría ganado. Pero, como cristiano, oró, pensó en los demás y optó por ser honesto, diciendo no a la inmundicia de la corrupción. Solo manos limpias, pero limpio el corazón".
    "Si alguien te entrega un sobre, te prometerá favores y riquezas, no caigas en la trampa, no te dejes engañar, no te dejes tragar por el pantano del mal", concluyó Francisco en su mensaje a los jóvenes. (ANSA).