Una cumbre de guerra será la que se les presentará a los 27 líderes de la Unión Europea, que que se reunirán en Bruselas con motivo del Consejo Europeo de marzo, tradicionalmente dedicado a cuestiones económicas, pero que, esta vez, girará en torno a la seguridad y a la defensa.
Los jefes de las instituciones destacadas (Comisión, Consejo, Alto Representante) están tratando de transmitir un sentido de urgencia a los Estados miembros y el proyecto de conclusiones parece reconocer la necesidad de acelerar el ritmo, especialmente en materia de apoyo militar a Kiev.
No obstante, las diferencias persisten.
Por ejemplo, sobre la posibilidad de endeudarse para las inversiones necesarias para fortalecer la industria bélica europea, donde surge la ya clásica división entre los países "frugales" y el frente que presiona por los eurobonos.
La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, encargó hoy al expresidente de Finlandia, Sauli Niinisto, la elaboración de un informe sobre cómo mejorar la preparación y disponibilidad de la defensa de la UE.
"Está claro que ya no hay lugar para ilusiones, el mundo se ha vuelto más peligroso y la UE debe despertar: sabemos que las ambiciones de (Vladimir) Putin no se detienen en Ucrania", subrayó Von der Leyen, explicando que el plazo para elaborar el informe es el próximo otoño.
Un pasaje de las conclusiones destaca la necesidad "imperativa" de "reforzar la preparación civil-militar" dado el "panorama de amenazas en evolución", todo para lograr una "gestión estratégica de la crisis".
En ese sentido, "pedimos que se desarrolle una estrategia de preparación" que tenga en cuenta "a toda la sociedad", añadió Von der Leyen.
"Si queremos la paz, debemos prepararnos para la guerra", advirtió, por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en vísperas de la cumbre.
En resumen, los ciudadanos deben implicarse porque los obstáculos, especialmente desde un punto de vista híbrido, pueden aumentar repentinamente.
Y Finlandia es famosa por su modelo de participación ciudadana activa en materia de seguridad.
La agenda de la cumbre tiene un amplio capítulo sobre el fortalecimiento de la defensa europea, pero los frugales -encabezados por Alemania- pidieron y, de momento, obtuvieron, la eliminación del proyecto de conclusiones de la referencia a "herramientas innovadoras" para financiar el fortalecimiento de la industria de la UE.
Así, ahora se pasaría a pedir a la Comisión que prepare un documento sobre "posibles opciones".
De hecho, se trata de un paso atrás respecto a la hipótesis de los llamados bonos de Defensa o, como plan B, los bonos de Proyecto, es decir, bonos emitidos para un plan industrial de defensa que une a varios países miembros.
"Si cada uno gastara el 2% del PIB en defensa, se podrían invertir 80 mil millones más", señaló un diplomático europeo.
"Y además existen otras soluciones, por ejemplo fondos privados o financiación del Banco Europeo para las Inversiones (BEI)".
Así, una próxima generación para la defensa, que vio a Italia en primera línea durante meses, es actualmente impracticable.
El progreso de una cumbre más impredecible de lo habitual dependerá del alcance de las divisiones.
"Las conclusiones son estables y latentes", bromeó un diplomático europeo.
Por otro lado, en cuanto al tema de Medio Oriente, es probable que la guerra entre Israel y Hamás tensione aún más el clima.
El objetivo es llegar a una declaración conjunta, la segunda desde el inicio de la guerra.
Sin embargo, los términos de un alto el fuego y el desembolso o no de fondos a la organización UNRWA siguen siendo puntos sobre los cuales un acuerdo está lejos.
De hecho, se podría crear otra fractura -otro obstáculo más al sentido de urgencia- por el uso de las ganancias rusas.
Algunos países (Malta o Austria, por ejemplo) se muestran reacios a respaldar la propuesta de la Comisión de utilizarlos para armar a Kiev, ya que están vinculados a la neutralidad constitucional.
Budapest, como siempre, incluso agita el veto.
Lo cierto es que la rápida aprobación que pide Josep Borrell puede que al final no lo sea tanto.
Se trata de "un nuevo paso" en la "violación de los fundamentos de las leyes europeas", tronó el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
También en el frente ruso se aprobaron sanciones a los responsables de la muerte del opositor Alexei Navalny (el procedimiento podría finalizar el viernes por la mañana).
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