La negativa del partido progresista Catalunya en Comú, de la ex alcaldesa de Barcelona Ada Colau, a apoyar las cuentas regionales precipitó el adelanto de las elecciones, que estaban previstas para el próximo año.
Catalunya en Comú había pedido a Aragonès a cambio de su apoyo el rechazo contundente al polémico proyecto del megacasino de Tarragona, el Hard Rock.
Los presupuestos contaban con el apoyo de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), el partido del presidente regional, Pere Aragonès, y de los socialistas.
Los socialistas ya apoyaron los presupuestos de Aragonès en 2023 y 2024.
Tras la tensión vivida hoy por el gobierno regional para buscar los apoyos que le faltaba, la votación de las enmiendas a los presupuestos terminó con 68 votos a favor y 67 en contra.
Luego de la votación, Aragonès anunció la convocatoria de una reunión extraordinaria de su gobierno y posteriormente el adelanto electoral.
"Las líneas rojas y el bloqueo entre unos y otros -dijo en referencia a los socialistas y Comunes- ha comportado que el presupuesto con más recursos de la historia de Cataluña haya sido rechazado", declaró Aragonès en su comparecencia.
Las encuestas de ERC le otorgan unos resultados similares a los actuales mientras que los socialistas verían debilitada su posición.
ERC espera además con el adelanto electoral coger a contrapié a su máximo rival, el también independentista Junts per Catalunya, el partido del ex presidente Carles Puigdemont, que aún no tiene candidato.
Aragonès, que lleva tres años al frente del gobierno regional, anunció hace unas semanas que será el candidato de ERC.
En los anteriores comicios los socialistas fueron la fuerza más votada, aunque empataron a escaños con ERC.
La gestión de Aragonès se ha visto marcada por la sequía más grave que sufre Cataluña, la lucha contra la pandemia y la inflación.
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