(ANSA) - MADRID, 18 NOV - El líder del partido político
español Vox, Santiago Abascal, y la premier y presidenta de
Hermanos de Italia (FDI), Giorgia Meloni, abordaron, en Roma,
la situación de la Unión Europea (UE) en un año clave para su
futuro y la estrategia de ambos grupos de cara a las elecciones
europeas de junio de 2024.
Abascal informó asimismo a Meloni que la situación en España
es de "grave riesgo" para el Estado de derecho, con
consecuencias políticas y sociales, al conceder, el gobierno,
una amnistía a los acusados del golpe de Estado de 2017 en
Cataluña, según informa un comunicado difundido por Vox.
Además, se lee en la nota, el nombramiento de Pedro Sánchez
es "irregular" por los acuerdos precisamente hechos por el
gobierno
FDI es uno de los principales socios de Vox a nivel europeo.
Se trata de una relación estable -continúa la nota- que nos
permitió desarrollar una estrategia común junto con el resto de
grupos que integran el Grupo de Conservadores y Reformitas
Europeos (ECR), del que Meloni ostenta la presidencia.
"No podemos dar por perdida la batalla contra el golpe de
Pedro Sánchez. Debemos seguir resistiendo con una movilización
social sostenida, dar una respuesta institucional coordinada en
las regiones donde no hay mayoría golpista, también en el Senado
y comunicar a todos nuestros aliados internacionales lo que está
ocurriendo en España", manifestó Abascal, al margen de la gran
manifestación que se celebra en el centro de Madrid.
Y justamente la oposición de centroderecha volvió a las
calles del centro de Madrid, por primera vez desde el regreso de
Pedro Sánchez al gobierno. Una cita convocada por un nutrido
grupo de asociaciones bajo el lema "Ni en mi nombre: ni
amnistía, ni autodeterminación", en la que están el líder del
Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, y el propio Santiago
Abascal.
Una protesta absolutamente pacífica, muy diferente a las que
se se desarrolla cada tarde, durante 15 días consecutivos, bajo
la sede nacional del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
En una concurrida plaza de Cibeles, hay muchas banderas
nacionales y muchas azules de la Unión Europea. Unas 170.000
personas participaron hoy en esta manifestación en el centro de
Madrid contra la amnistía, según estimaciones del ministerio del
Interior.
Los mensajes son los mismos que animan desde hace semanas
todas las manifestaciones de la centroderecha: Pedro Sánchez
merece acabar "en prisión", no se le puede considerar "un
presidente, sino un criminal".
Otro de los cánticos más escuchados fue el que también desea
un futuro "en prisión" al expresidente catalán Carles
Puigdemont, líder de Junts per Catalunya, que concedió su
confianza a Sánchez a cambio de una amnistía a favor de los
secesionistas catalanes con casos abiertos.
"Son terroristas, no progresistas" y "nosotros
resistiremos", se oyó decir entre los participantes contra el
nuevo gobierno progresista que se formará en las próximas horas.
No hubo discursos de los líderes en el escenario: sólo hablaron
representantes de la sociedad civil, incluido el filósofo
Fernando Savater.
Por último, un grupo de manifestantes contra la amnistía, no
más de unos cientos de personas, después de protestar en el
centro de Madrid, se dirigió al Palacio de la Moncloa, la sede
del gobierno español ubicado en las afueras de la ciudad.
(ANSA).
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. © COPYRIGHT ANSA