Acuerdo Europeo sobre migración, Roma canta victoria

Paso atrás de Berlín con las ONGs. Meloni, se impuso nuestra línea

Rescate de migrantes cerca de Lampedusa (foto: ANSA)
Rescate de migrantes cerca de Lampedusa (foto: ANSA)

(ANSA) - GRANADA,Por el enviado Michele Esposito - Un punto de inflexión nocturno, una ronda de llamadas telefónicas que, quizás, involucró directamente a la premier italiana Giorgia Meloni y al canciller alemán Olaf Scholz, y un paso atrás de Alemania. En la vigilia de la cumbre de Granada, la Unión Europea logra el acuerdo sobre la normativa de las crisis migratorias y puede, finalmente, esperar conseguir el Pacto en su totalidad.
    El entendimiento llegó en la reunión de los representantes permanentes en Bruselas y, para alcanzarlo, fue decisiva la recalificación del punto concerniente a la principal manzana de la discordia entre Roma y Berlín: las ONGs que actúan en el Mediterráneo realizando rescates.
    "Pasó nuestra línea, la enmienda alemana fue retirada", subrayó Meloni, que podrá ir a Andalucía luego de haber logrado una victoria política nada sencilla en el frente de los migrantes.
    El nuevo texto mantiene el punto en el que se dice que las ayudas humanitarias son excluidas de los casos de instrumentalización de la migración, y lo degrada del articulado verdadero y propio a los "considerando", o bien aquellos que figuran como las precuelas de lo regulado por la legislación.
    De hecho, desde el punto de vista legislativo, el pasaje pierde toda su fuerza. El texto es, por tanto, muy similar al anterior del compromiso presentado por la presidencia española el pasado jueves al Consejo de Asuntos Internos. Un compromiso que a Italia no le gustó ni en términos de tiempo ni de fondo, dado que puso énfasis en las operaciones de las ONGs precisamente en los días del choque entre Roma y Berlín.
    "La enmienda alemana era un paso atrás", reafirmó la presidenta del Consejo, refiriéndose también a las declaraciones de la cumbre MED 9 en Malta, donde recibió el apoyo de París en materia de migración.
    "El acuerdo fue un éxito para Italia, ahora se puede avanzar", subrayó el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani.
    El entendimiento fue saludado incluso por la dirección UE, a comenzar por la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, y la presidenta de la Cámara, Roberta Metsola. Con el visto bueno a la normativa sobre crisis, cae asimismo el veto a las negociaciones que la Eurocámara había impuesto acerca de los otros expedientes del Pacto sobre Migración y Asilo. Un acuerdo que, según reiteró Von der Leyen, debe concluir antes del final de la legislatura. Es decir, antes de que se convierta en rehén de la campaña para las elecciones europeas.
    Berlín, por su parte, no admitió derrota alguna. En un tuit, Scholz habló de "giro histórico", y se detuvo en uno de los puntos más caros al gobierno alemán, el de los desplazamientos secundarios.
    La regulación de crisis "limitará efectivamente la inmigración irregular a Europa y aliviará permanentemente la carga de estados como Alemania". El periódico alemán Faz no dejó de subrayar cómo Berlín había "golpeado la granítica posición de Roma" en las negociaciones.
    En realidad, dentro del gobierno, semáforo el tema de las ONGs que era especialmente importante para la componente de los verdes, la ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock.
    Que ya en el texto presentado el pasado jueves por España había tenido que sacar lo mejor de una mala situación ante la línea impuesta por Scholz. "El acuerdo fue un éxito para Berlín y la UE, luchamos para que se garantizaran unos estándares humanitarios mínimos", se defendió Baerbock.
    La fumata blanca, en la óptica europea, restringe las posibilidades de que la cumbre de los 27 en Granada se transforme en un cuadrilátero. De migración se hablará así es, pero es improbable que se vuelva sobre la normativa.
    Más real, en cambio, es que se hable del Memorándum con Túnez, que después de los últimos chantajes de Kais Saied provocó un nuevo choque entre Von der Leyen y Charles Michel, Más de un país está listo para atacar el modus operandi usado por la Comisión. Y la compilación de la Declaración de Granada se está revelando más difícil de lo previsto.
    Polonia e Hungría, contrarias al Paco sobre Migración en su totalidad, anunciaron batalla. El riesgo de un enfrentamiento a la sombra de la Alhambra está a la vuelta de la esquina. Nadie quiere dejar Granada como hizo el último sultán de los moros, Boabdil, a fines del siglo XV en lágrimas mientras, desde un montículo, saludaba para siempre a la ciudad andaluza. (ANSA).