Freno a los grandes centros para inmigrantes

Hay acuerdo entre gobierno y regiones

Una multitud de 250 migrantes desembarcados en Catania (foto: ANSA)
Una multitud de 250 migrantes desembarcados en Catania (foto: ANSA)

(ANSA) - ROMA, por Lorenzo Attianese - El ministerio del Interior reveló su línea para enfrentar el aumento de los flujos migratorios en Italia con la promoción de recepción generalizada, pero excluyendo la creación de grandes estructuras y, al mismo tiempo, fortalecer los cuatro puntos críticos de primera llegada ubicados en Calabria y Sicilia.
    El Viminale lo hizo ante gobernadores y allanó así el camino para una mayor colaboración con los territorios, sancionado por la creación de una mesa de discusión sobre el tema para la coordinación permanente con las regiones.
    Las modalidades operativas de gestión de emergencias podrían seguir la organización adoptada para los refugiados ucranianos, con la participación del comisario Valerio Valenti, que se reunió por primera vez con los gobernadores, junto al titular del Ministerio del Interior y el ministro de Protección Civil, Nello Musumeci.
    La discusión fue "constructiva", dijeron tanto el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, como las propias regiones.
    Un clima positivo, por lo tanto, que esta vez podría conducir a una mayor distensión también en relación con los territorios como Emilia-Romagna, Toscana, Campania y Puglia, más Valle d'Aosta, que se habían negado a firmar el acuerdo sobre la declaración del estado de emergencia, denegando efectivamente al comisario y excluyéndose de la ordenanza dispuesta por Protección Civil.
    Ahora, el ministro Musumeci dice que está "seguro de que los presidentes de esas cinco regiones puedan revisar su posición".
    Y el subsecretario de la presidencia de Emilia Romagna, Davide Baruffi, comentó: "si el objetivo es potenciar la acogida y acordar las cuotas de distribución de migrantes en los territorios, creo que se puede llegar a un acuerdo".

Barcaza de migrantes provenientes de Libia frente a Ravenna

    Por lo tanto, el modelo de grandes instalaciones de acogida como la -ya cerrada en 2018- que se construyó en Cona, en la región del Véneto, se desvanece, mientras que algunos presidentes, como Stefano Bonaccini, también hicieron hincapié en el riesgo de una nueva crisis humanitaria, con un nuevo éxodo hacia Italia tras el conflicto estallado en Sudán.
    Sería la enésima situación de inestabilidad en África, que se suma a la ya difícil gestión de los refugiados de Túnez En cuanto a números, las previsiones de Musumeci también van al alza: "tenemos buenas razones para creer que las 40.000 personas que desembarcaron en apenas cuatro meses -dice- son solo un aperitivo frente a los flujos que podríamos registrar en unos meses", de cara al verano boreal.
    Y precisamente en estas horas la Guardia Costera tunecina bloqueó 13 intentos de inmigración ilegal, rescatando a 501 personas a bordo de embarcaciones en dificultades frente a las costas de Sfax, Kerkennah y Mahdia, mientras el desembarco del Geo Barents, el barco de búsqueda y rescate de Médicos Sin Fronteras, de 75 migrantes, entre ellos muchas mujeres y niños.
    El velero Nadir de la ONG Resqship rescató a 41 personas y se dirigió a Lampedusa -donde todavía hay recién llegados-, mientras que el Open Arms Astral rescató dos embarcaciones que transportaban un total de 83 personas, entre ellas mujeres y niños.
    Y recuperó el cuerpo de un migrante: "Estamos en el mar para salvar vidas -escribió la ONG en Twitter-, pero a veces tenemos la tarea de devolver la dignidad al cuerpo de quienes han perdido la vida".
    "Pasó hoy en el Astral, no hemos llegado a tiempo".
    Por otro lado, para intentar frenar las salidas desde las costas tunecinas y reforzar la asociación estratégica, llegó a Túnez la comisaria europea de Asuntos Interiores, Ylva Johansson.
    Los temas que estaban sobre la mesa discusión se referían a la tarea de controlar el tráfico ilícito de inmigrantes, la repatriación y reintegración, así como garantizar la protección de los más vulnerables y de la migración legal.
    La primera ministra Giorgia Meloni también habló de la "lucha contra los traficantes y la inmigración ilegal" durante su visita al Reino Unido: "Sigo su trabajo y estoy absolutamente de acuerdo", le dijo al primer ministro británico Rishi Sunak.
    Los dos líderes también firmaron un acuerdo que organiza iniciativas conjuntas en áreas prioritarias de colaboración, incluida la migración. (ANSA).