Según información de las empresas socias de la CCS, el apagón afectó especialmente a los pequeños comercios que no tienen equipos generadores de respaldo, "viéndose obligados a cerrar sus puertas antes del horario habitual. Esto repercutió directamente en sus ventas y en la continuidad de sus operaciones".
La Cámara enfatizó la necesidad de fortalecer los protocolos de contingencia para minimizar el impacto de estos eventos en la actividad económica y garantizar la estabilidad operativa del comercio.
También es clave avanzar en incrementar la inversión para tener una infraestructura más resiliente, que permita recuperar el suministro eléctrico con rapidez en beneficio de la población y del sector productivo, agregó.
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