Inter superó hoy por 2-0 como local a Lazio y atrapó el penúltimo pasaje a las semifinales de la Copa Italia, instancia en la que animará el "Derby Della Mole" frente al Milan en duelos de ida y vuelta previstos para el 2 y el 23 de abril.
El austríaco Marko Arnautovic a los 39' y el turco Hakan Calhanoglu, de penal, a los 77' le dieron la victoria al "nerazzurro" en el Giuseppe Meazza y el boleto a la próxima ronda, en la que Bologna espera por el ganador del choque que sostendrán mañana Juventus y Empoli en Turín.
Debido a su pasado como jugador y conductor de Lazio, el de hoy fue un partido especial para Simone Inzaghi, técnico de un Inter que escaló a la cima del campeonato este fin de semana al vencer por 1-0 a Genoa y aprovechando la derrota de Napoli por 2-1 en campo del Como, el domingo.
Inter, que le dio descanso al capitán argentino Lautaro Martínez (autor del gol del triunfo frente a Genoa en este mismo estadio), dio un paso más hacia la recuperación de la corona en Copa Italia, torneo que conquistó en 2021-22 y en 2022-23 y en el que suma nueve títulos.
Los mismos tiene Roma, con dos más que una Lazio que celebró en Copa Italia por última vez en 2018-19 y que hoy afrontó un duelo complicado, tal como advertía su entrenador Marco Baroni al recordar la derrota por 6-0 que su equipo sufrió el 16 de diciembre en el Olímpico ante el mismo rival en la decimosexta fecha del campeonato.
Hoy, frente a unos 55 mil aficionados (un millar de los cuales del equipo visitante), la derrota fue más modesta ante un Inter que sin Lautaro en cancha le dio minutos a su compatriota Joaquín Correa, ingresado por Arnautovic a los 63', y al iraní Mehdi Taremi en la ofensiva.
El arco fue custodiado por el español Josep Martínez, reemplazante del lesionado suizo Yann Sommer desde el pasado choque frente a Genoa, ante una Lazio que no pudo contar con su goleador argentino Valentín Castellanos, lesionado.
En un partido arbitrado por Michael Fabbri, el visitante propuso, pero el local acertó con el golazo de volea de Arnautovic y comenzó a inclinar la balanza que terminó de desequilibrar el gol de penal de Calhanoglu, que en aquel mencionado 6-0 abrió la cuenta también desde los 12 pasos.
Bajo la lluvia cantó victoria Inter, que preservó a algunos de los titulares pensando en el duelo que animará el sábado frente al Napoli (ahora escolta a un punto de distancia) por la vigesimoséptima fecha del campeonato que lo tiene en lo más alto.
Josh Allen, mariscal de campo de los Buffalo Bills de la NFL estadounidense, y su novia, la actriz y cantante Hailee Steinfeld, fueron testigos preferenciales en San Siro de la clasificación de Inter ante una Lazio que quiso, pero no pudo.
Josep Martínez también fue responsable del triunfo pues le dejó atragantado el grito de gol en más de una ocasión al danés Gustav Isaksen, uno de los más incisivos en el equipo de Baroni que salió a jugarle de igual a igual a un Inter cínico, capaz de castigarla cuando menos lo esperaba.
El gol de Arnautovic refrendó esa máxima y le permitió al equipo de Inzaghi irse en ventaja al descanso con la única preocupación de haber tenido que reemplazar a Matteo Darmian a los 24' (ingresó el neerlandés Denzel Dumfries) por una dolencia muscular).
Isaksen siguió siendo el jugador más peligroso de Lazio en el complemento, pero volvería a chocar con la solidez de Martínez y, cuando éste no podía evitar la caía de su valla, fue Dumfries, quien de cabeza despejó el peligro sobre la línea de sentencia.
Inter respondió con una llegada a fondo del zaguero alemán Yann Bisseck para dejar a Taremi en situación de gol, pero quien apareció en escena esta vez fue el ingresado español Mario Gila el que mantuvo a Lazio a tiro en el marcador.
Fueron claves en Inter los ingresos de Calhanoglu, por el albanés Kristjan Asllani a los 63', y de Correa, quien estaba a punto de cumplir con la "ley del ex" cuando Samuel Gigot se vio obligado a cometerle una falta en el área que el turco trocó por gol desde los 12 pasos.
Primer gol para él, que no festejaba desde el 28 de diciembre (cuando le marcó uno a Cagliari, también de penal, en el triunfo por 3-0) y partido prácticamente sentenciado ante una Lazio que no se dio por vencida, pero no tuvo fortuna como para torcer la historia.
La última ocasión para achicar distancias en el marcador llegaría sobre el final, cuando la visita reclamó un penal tras una falta de Dumfries sobre el portugués Nuno Tabares que tanto el árbitro, como el VAR, determinaron que había sido fuera del área.
Fue la última emoción de la noche en el Meazza, donde Inter atrapó el pasaje a semifinales y extendió su racha positiva antes de comenzar a prepararse para el trascendental choque del sábado en casa del Napoli.
El jueves, también por el campeonato y en un duelo postergado por la novena fecha debido a las inundaciones, Bologna recibirá a un Milan que ya conoce a su próximo rival en Copa Italia.
El equipo de Vincenzo Italiano aguarda por el vencedor del partido que jugarán mañana en Turín Juventus, último campeón y el más laurado de este certamen con 15 coronas, y un Empoli que buscará dar el batacazo.
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