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El ministro del Interior, Juan
Fernando Cristo, se manifestó hoy pesimista frente a la
"voluntad de paz" del grupo guerrillero Ejército de Liberación
Nacional (ELN), luego que el gobierno suspendiera la mesa de
diálogos, como efecto del ataque a un base militar en el sureste
que dejó tres muertos y una veintena de heridos.
"No soy muy optimista, soy pesimista ante la voluntad de paz
del ELN. El Gobierno ha actuado con generosidad y al ELN lo dejó
el tren de la historia", aseguró Cristo en diálogo con W Radio,
pese a que en la víspera ese grupo guerrillero advirtió, a
través de uno de sus máximos jefes, Antonio García, que los
diálogos de paz no estaban rotos y que se podrían mantener las
conversaciones bajo el fragor de la guerra.
Para el jefe de la política en el gobierno de Gustavo Petro
el problema de la persistencia de la confrontación por parte del
ELN, que ajusta 30 años de fallidos de procesos de paz con
diferentes gobiernos, es "interno" debido a "divisiones"
profundas que le impiden tomar "una decisión conjunta".
"Para hablar de paz se necesitan dos y el ELN no parece
interesado en un proceso de paz, sino en estar sentados en una
mesa", afirmó Cristo, quien dijo que habrá que esperar si esa
organización responde al pedido de los negociadores de paz del
gobierno que en la víspera reclamaron gestos para no abandonar
las conversaciones.