"Estamos acabando con un control a un producto que realmente no existe en el mercado", argumentó Moltó.
A partir del 30 de abril de 2025 no habrá más incentivo para los arroceros.
La regulación fijaba en 40 centavos de dólar el precio de la libra de arroz de primera desde hace 10 años.
En el mercado solo había en existencia el 7,29% del inventario de arroz de primera que estaba controlado, frente al 92,71% de inventario del arroz especial que se vende a un mayor precio.
Moltó dijo que "no es justo que los consumidores deban pagar un arroz de mala calidad y el gobierno esté gastando el dinero en un subsidio en un producto que realmente no existe y no se está vendiendo".
En los últimos 10 años fueron destinados 860 millones de dólares en subsidios a los productores de arroz, según datos el ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA).
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