Donde parece haber una gran coincidencia es en la indicación del ministro Raffaele Fitto como comisario europeo.
Pero en otros temas, la cumbre promete ser menos previsible, como la cuestión de la ciudadanía o la del programa de pensiones, que enfrentan a Forza Italia y a la Liga.
Al ambiente chispeante contribuye también la broma con la que Tajani, líder de Forza Italia, defendió su propia posición sobre el Ius Scholae, la interpretación que prevé otorgar la ciudadanía a quienes estudiaron en Italia, aunque no hayan nacido en el país, criticada por sus aliados.
"La cuota 41 tampoco está en el programa de gobierno, pero la estamos discutiendo", dijo, en alusión a la reforma de las pensiones por la que apuesta la Liga y utilizando las mismas palabras con las que su aliado rechazó otorgar la ciudadanía a estudiantes migrantes, como propuso Forza Italia.
Y Tajani también reiteró la necesidad de aplicar la autonomía diferenciada solo después de aprobar la LEP, la norma que prevé los niveles esenciales de servicios de acuerdo a cada región, para dar "garantías a todos los ciudadanos italianos, de norte a sur".
El canciller italiano descartó que su partido pueda sumarse al referéndum que la oposición de izquierda impulsa en las diversas regiones contra el proyecto de autonomía diferenciada.
"No estamos por el referéndum, nunca habrá un gobierno formado por Forza Italia y el M5 o Forza Italia y el PD. Nosotros somos el centro del centro-derecha". Para apoyar al centro-derecha, nuestra tarea es ocupar el espacio entre Meloni y Schlein: no debemos dejar espacio a la izquierda en algunas cuestiones importantes", sostuvo.
Y quiso ser claro". "no hay ninguna posibilidad de que caiga el Gobierno".
El activismo de Tajani sobre la cuestión de la ciudadanía ha producido chispas con Salvini, mientras que Meloni se ha mantenido al margen de la polémica entre ambos, aunque su partido, Hermanos de Italia, no ocultó la irritación por las fugas hacia adelante del líder FI.
A la espera de su regreso al Palazzo Chigi tras un par de semanas de relax en Apulia, la premier habría dado la línea a seguir: la reforma de la ciudadanía no está en la agenda. Y, según los bien informados, también lo aclarará en la cumbre del viernes: "Debemos centrarnos en respetar el programa del Gobierno".
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