El día en que las firmas digitales también superan el umbral de 500.000 (el 31 de julio ya se había alcanzado el quórum necesario), Cerdeña llega también para desafiar, después de Apulia liderada por Michele Emiliano, la ley de banderas de la Liga.
"Un acto de gran valentía y de fuerza política", exulta Giuseppe Conte, que lee en el gesto del gobernador de M5S (Cinco Estrellas) sardo "un mensaje claro dirigido al Palacio Chigi".
Ahora la "duplicación", relanza la CGIL (Confederación General Italiana de Trabajo), entre las numerosas siglas del comité que promueve el referéndum, para frenar lo que la oposición acusa de ser una ley de "Italia dividida".
Se trata de una "ley injusta" que hay que "luchar", afirma Todde, justificando la resolución de su consejo con la que la región del estatuto especial cuestiona la ley de centroderecha.
Una elección criticada por Fratelli d'Italia porque de este modo "se abandona una batalla histórica en Cerdeña", afirma Francesco Mura.
El consejo insular es el segundo, después del de Apulia, que ha adoptado formalmente la resolución para solicitar la intervención del Consejo. También se inició un proceso en las otras regiones "rojas", empezando por Emilia Romagna.
Con la petición de cinco regiones ni siquiera hubiera sido necesaria la recogida de firmas para pedir juicio popular. Pero el impulso digital -en su primera prueba de referéndum-, junto con los lugares más clásicos, mantiene alta la atención sobre el tema y el entusiasmo por posibles cifras récord, y da ahora a los promotores del referéndum la esperanza de alcanzar y superar el millón de firmas antes de la fecha límite de septiembre.
La campaña del referéndum comenzó hace un mes (online del 26 de julio) y está registrando "una gran participación", subraya la demócrata Marina Sereni, con "miles de personas que también firman en los asientos".
Se trata de "una clara notificación de desalojo al gobierno (Giorgia) Meloni", añade su colega Marco Simiani.
Un "resultado extraordinario", añade el portavoz de Europa Verde y diputado de los Verdes y de izquierda, Angelo Bonelli, que "demuestra cuán sentida es la cuestión de la defensa de la Constitución de las prerrogativas del Presidente de la República y de la unidad del país contra el intento" de la "reforma Calderoli" para "dividirlo no solo en dos, sino en varias partes, Enfrentando el norte contra el sur".
Entre los más activos, subraya el alcalde de Catanzaro Nicola Fiorita, están "los calabreses", aunque "los primeros entre las regiones italianas, con 97.000 firmas digitales y más de 13.000 firmas recogidas en banquetes", afirma la CGIL local, "es Campania".
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