Ataque a hospital de Gaza, cerca acuerdo por rehenes

ONU: "Masacre civil sin precedentes". Evacuados bebes prematuros

(ANSA) - TEL AVIV, 20 NOV - El acuerdo para la liberación de decenas de rehenes israelíes parece estar cada vez más cerca, mientras Hamás denuncia un ataque israelí al hospital indonesio en el norte de la Franja que, según se informó, causó varias víctimas.
    En tanto, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, afirmó que en Gaza "estamos siendo testigos de una matanza de civiles que no tiene comparaciones ni precedentes en ningún conflicto" desde que asumió el cargo.
    El que reabrió un rayo de esperanza para el intercambio de prisioneros fue el presidente estadounidense, Joe Biden, quien, en su cumpleaños número 81, reiteró su convicción de que está cerca un acuerdo para la liberación de los secuestrados en manos de Hamás.
    El acuerdo, que todavía tiene muchos puntos pendientes, según algunos rumores prevé el intercambio de algunos rehenes israelíes - en particular mujeres y niños- con palestinos detenidos en las prisiones del Estado judío.
    La liberación se produciría en varias fases y afectaría a unas 75 personas. Todo ello estaría asociado a un alto el fuego humanitario de entre 3 y 5 días.
    Una fuente diplomática citada por el Times of Israel explicó que Hamás pide la liberación de 100 hombres y mujeres detenidos y una tregua de cinco días en la que el ejército no tendrá que utilizar drones para mantener bajo control los movimientos de la facción islámica. Pero hay bastantes problemas.
    Por la tarde, el propio Hamás hizo saber que todavía no hay nada definitivo, acusando a Benjamín Netanyahu de posponer el acuerdo cada vez que se acerca, mientras Israel duda de que la facción islámica sepa con certeza dónde están (y en qué condiciones) todos los rehenes.
    El primer ministro tampoco tiene intención de liberar a los prisioneros vinculados a Hamás, además de tener que hacer frente a problemas internos: las familias de los rehenes, que se reunieron esta tarde con el gabinete de guerra dirigido por Netanyahu en Tel Aviv, reiteraron con fuerza querer "un compromiso escrito del gobierno" de traer de vuelta a "todos los secuestrados", excluyendo así la posibilidad de una liberación parcial.
    Pero a pesar de todo, como informó TV Kan, la sensación generalizada es el de un cauto optimismo de que el acuerdo pueda materializarse pronto.
    También gracias a que Egipto está presionando al líder político de Hamás en Gaza, Yahya Sinwar, para que libere al menos a los niños secuestrados (hoy, entre otras cosas, con motivo del Día Mundial del Niño, las familias que tienen niños en manos de milicianos protestaron enérgicamente bajo la sede de UNICEF en Tel Aviv, acusando a la organización de la ONU de "abandonar" a menores israelíes).
    Sobre el terreno, el ataque al hospital indonesio en el norte, denunciado por Hamás, provocó 12 muertos.
    "El ejército está asediando el hospital y tememos -afirmó el portavoz del ministerio de Sanidad de la facción islámica Ashraf al-Qidreh- que allí suceda lo mismo que ocurrió en el al Shifa" en Gaza City.
    Además, desde el al Shifa, a lo largo de un corredor humanitario, se evacuó a los recién nacidos prematuros, algunos de los cuales ya habían llegado a El Cairo, mientras que otros se detuvieron en la ciudad egipcia de Al-Arish. De los 31 que originalmente debían irse, según la OMS, llegaron 28.
    Israel (que hasta ahora perdió 66 soldados desde el inicio de la operación terrestre) está fortaleciendo sus posiciones en el norte de la Franja y en Gaza City, donde también fue ocupado el Palacio de Justicia.
    En el sur de la ciudad, en el barrio de Zaitun, los militares -que capturaron a 300 milicianos desde el comienzo del conflicto- anunciaron que habían encontrado una fábrica de cohetes debajo de una mezquita.
    Gaza -desde donde siguen lloviendo cohetes, incluso sobre Tel Aviv- sigue siendo el frente principal, la frontera con el Líbano es ahora una zona de guerra abierta con fuertes lanzamientos por parte de Hezbolá y la igualmente robusta respuesta israelí que, según los medios libaneses, afectó y causaron graves daños a la iglesia de San Jorge en Yarun, a pocos kilómetros de la línea de demarcación.
    En la Franja los muertos ascienden ya a 13.300, según el balance facilitado por las autoridades locales: la única buena noticia del día es que el primer hospital de campaña con médicos y personal sanitario jordanos entraron por el cruce de Rafah.
    (ANSA).