Masiva manifestación ante la oficina del premier, que los recibirá pronto
''La devolución de los rehenes a Israel es la prioridad suprema y también precede a la destrucción de Hamás'', dijo hoy el ministro Gadi Eisenkot, que forma parte del gabinete de guerra de Israel, a una delegación de las familias de los rehenes. ''La demolición de Hamás lleva tiempo, y para los rehenes no hay tiempo que perder'', acotó Eisenkot. También dijo que los funcionarios israelíes se ocupan de eso "día y noche".
El ministro Benny Gantz, también miembro del gabinete de guerra, añadió que la presión militar sobre el terreno en Gaza está ayudando a los esfuerzos por liberar a los rehenes. Así lo informó el sitio web Ynet.
Netanyahu convocará al gabinete de guerra en los próximos días para una reunión con las familias de los rehenes israelíes retenidos por Hamás en Gaza. Así lo anunció la oficina del Primer Ministro, bajo cuya sede en Jerusalén tuvo lugar hoy una gran manifestación para presionar por la liberación de los prisioneros.
La procesión, que comenzó el martes pasado desde Tel Aviv, recorrió casi la totalidad de los 63 kilómetros previstos para su recorrido por las carreteras de Israel.
La marcha, en la que también participa el líder de la oposición gubernamental, Yair Lapid, finalizará por la tarde en Jerusalén frente a las oficinas del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, donde los manifestantes exigirán a gritos la liberación de los secuestrados, aproximadamente 240.
Casi simultáneamente, en Tel Aviv, una delegación de familiares se reunirá con los ministros de emergencia Benny Gantz y Gadi Eizenkot.
Las familias dijeron no haber recibido respuesta a su solicitud de reunión por parte de los otros ministros del gabinete de guerra: el primer ministro Benjamín Netanyahu, el ministro de Defensa Yoav Gallant y el ministro de Asuntos Estratégicos, observador del gabinete, Ron Dermer.
La policía no ha ofrecido datos sobre cuántas personas marchaban hacia Jerusalén, mientras que los organizadores hablaron de decenas de miles. Las noticias del Canal 12 mencionaron unos 30.000.
El político e historiador Kobi Ben Ami, con dos familiares retenidos en Gaza, dijo al medio que las familias "rogaban" a los ministros que se reunieran con ellos y les dijeran qué planeaban hacer para traer de vuelta a los rehenes.
Ben Ami sostuvo que las familias estaban enormemente agradecidas por toda la ciudadanía que los habían apoyado en su marcha. "Enhorabuena a todas las personas que vinieron a ayudar, los miles que venían todos los días para traer comida y bebida y ayudar con refugio y simplemente dar apoyo. Simplemente estoy muy orgulloso de todos ustedes", dijo.
En tramo final hacia Jerusalén, se incorporó al grupo el líder de la oposición, Yair Lapid.
El viernes, los manifestantes pasaron la noche en Ein Hemed, donde celebraron un servicio de Shabat y la comida tradicional. Gantz llegó al lugar y habló con familiares de los rehenes, abrazando a muchos de ellos. "Cómo damos la bienvenida al Shabat sin saber dónde están retenidos nuestros seres queridos?", dijo Naor Pakciarz, representante de las familias del Kibutz Be'eri, una de las comunidades más afectadas por la masacre del 7 de octubre.
"Tenemos un mensaje para el gabinete de guerra: no puede ser que tomen una decisión sin sentarse con nosotros y mirarnos a los ojos. Míranos a los ojos!", bramó Pakciarz.
La marcha avanzaba mientras el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mantenía otra llamada el viernes con el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al-Thani y lo presionaba sobre la "necesidad urgente" de que los rehenes "sean liberados sin más demora", dijo la Casa Blanca. Qatar está mediando enter Hamás e Israel. (ANSA).