Vocero vaticano, el miércoles 22 encuentro de perfil humanitario
(ANSA) - CIUDAD DEL VATICANO, por Manuela Tulli - La próxima semana el Papa Francisco se reunirá con algunas familias de rehenes israelíes retenidos por Hamás y con un grupo de palestinos que sufren por el conflicto en Gaza. El encuentro - informó hoy el portavoz vaticano Matteo Bruni- se celebrará el miércoles 22 de noviembre, al margen de la audiencia general.
Las reuniones, que tendrán lugar en horarios separados, son "de carácter exclusivamente humanitario". "El Papa Francisco quiere demostrar su cercanía espiritual al sufrimiento de todos", explicó Bruni.
El Vaticano confirma lo que ya había ocurrido en las últimas horas, es decir, la reunión del Papa la próxima semana con los grupos que más sufren por el conflicto en Medio Oriente, empezando por las familias de los rehenes. "Estamos trabajando en eso y esperamos poder realizarlo lo antes posible", anticipó esta mañana el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin.
La liberación de los rehenes, según el prelado, es además "un punto clave" si queremos pensar en un posible punto de inflexión en el actual conflicto entre Hamás e Israel. "Quiero insistir y repetir el llamamiento que el Papa ha hecho varias veces, en cada discurso desde el 7 de octubre: la liberación de los rehenes es un punto clave para resolver la situación. Hay niños, incluso recién nacidos, mujeres embarazadas, personas mayores, adultos, jóvenes, no solo israelíes, sino también de otros pueblos y nacionalidades. Creo que este es un punto clave para intentar desbloquear la situación", afirmó el cardenal Secretario de Estado al inaugurar el evento Sky TG24 Live en Génova.
La liberación de los rehenes va de la mano de la petición de un "alto el fuego", que el Papa viene reiterando desde hace más de un mes. En particular, Parolin analiza lo que está sucediendo en el hospital Al Shifa en Gaza, que se ha convertido en el epicentro de duros enfrentamientos.
Golpear hospitales va en contra "del principio fundamental del derecho internacional humanitario. Hay algunos lugares que, incluso en caso de guerra, deben ser salvaguardados: en primer lugar, los hospitales y no debe haber ningún obstáculo para el trabajo de los trabajadores sanitarios", recuerda Parolín.
"Estos lugares deben ser salvaguardados por todos: nadie debe utilizarlos para sus propios fines y nadie debe atacarlos", aclara el jefe de la diplomacia vaticana.
Estas son las prioridades mientras la guerra está en pleno apogeo. Pero para la Santa Sede "la solución definitiva al problema palestino" sigue siendo la de "dos pueblos y dos Estados, así como un estatuto garantizado internacionalmente para Jerusalén" que "debe ser la ciudad de todos".
"Por supuesto, hoy, en esta situación de gran agitación y de gran pasión, es difícil volver a proponer esta fórmula y, sobre todo, aplicarla, pero creo que sigue siendo la fórmula decisiva para israelíes y palestinos", sostiene Parolin.
La explosión del conflicto en Medio Oriente no hace que la Santa Sede olvide el sufrimiento que vive el pueblo ucraniano. Y Parolin confirma que "el Papa siempre tiene el deseo de ir a Kiev y a Moscú" para poner fin a "esta guerra que continúa cruelmente, con enormes pérdidas para ambos lados".
(ANSA).