"Modelo Unifil difícil para el post Hamás en Gaza"

Analista: 'Mandato de la misión ONU es inaceptable para Israel"

(ANSA) - BEIRUT, 15 NOV - La hipótesis de replicar en la Franja de Gaza, en un eventual escenario post Hamás, el modelo de la misión de la ONU, Unifil, desplegada en el sur del Líbano, y de la que forman parte más de mil soldados italianos, parece muy improbable. Al menos según la opinión de Chiara Calabrese, investigadora italiana especializada en el estudio del movimiento chiítia libanés y afiliada al Instituto Francés de Estudios sobre el Cercano Oriente (IFPO) de Beirut. Desde que estalló la guerra en Medio Oriente, el rol de Unifil, con más de diez mil militares procedentes de 47 países está constantemente bajo los reflectores, sobre todo porque durante 17 años -desde la guerra entre Hezbolá e Israel en 2006 hasta el pasado 8 de octubre, cuando se reanudaron las hostilidades entre el Partido de Dios y el ejército israelí- el sur del Líbano ha vivido el período más largo de estabilidad del último medio siglo.
    "De muchas partes se habló últimamente de Unifil como una misión que, no obstante todo, logró por casi veinte años evitar la escalada armada entre Hezbolá e Israel", observó Calabrese.
    "Un punto de fuerza de Unifil es en efecto que habla continuamente, antes y después del 8 de octubre, tanto con el ejército libanés como con el israelí, de hecho es la única entidad que mantiene el diálogo entre las partes en guerra", agregó.
    El ejército libanés, debilitado por la crisis financiera en el país y poco presente en el sur del Líbano liberado en 2000 tras 22 años de ocupación israelí, se coordina de hecho con Hezbolá, permitiendo así a la misión de la ONU conducir una negociación continua sobre los planes tácticos y operativos.
    Además, sostuvo la estudiosa italiana radicada en Beirut, la propuesta de replicar el modelo de Unifil en Gaza tras la guerra "no parece realizable. Antes que nada, porque Israel no aceptaría jamás una fuera de la ONU autónoma e independiente".
    "Nos preguntamos -afirmó- qué fuerza de disuasión podría tener esta misión frente a un Estado, como Israel, que desde hace décadas no respeta el derecho internacional y que ignora los numerosos llamados de la ONU para un cese del fuego".
    El estado judío jamás escondió su decepción por una misión de la ONU que, en la óptica israelí, debería actuar con fuerza para desarmar a Hezbolá.
    Como recuerda Andrea Tenenti, vocero de Unifil, el mandato de la misión, definido en la resolución de la ONU 1.701 de 2006, no prevé sin embargo el desarme del Partido de Dios.
    "Israel no podría aceptar una misión de la ONU que deje espacio a la autonomía a Hamás" o a aquel que quedará, sostuvo Calabrese.
    Tenenti, por su parte, ratificó que "cada misión de la ONU tiene su particularidad, adecuada al contexto del país, a la situación política, a las voluntades de las instituciones de ese país y de los Estados miembro de la ONU". En cuanto a Gaza, la estudiosa italiana invitó a la cautela.
    "Es pronto para hablar del después de Hamás sin saber verdaderamente qué será el post Hamás. Mientras hablamos -afirmó-, Gaza, sus hospitales y su población civil continúan siendo bombardeados. La batalla todavía está en curso: no es cierto que Hamás sea derrotado, ni tenemos acceso a datos militares que puedan confirmar o desmentir una definitiva derrota de Hamás". Además, según Calabrese, "la población local de Gaza es profundamente solidaria con el movimiento islámico. Y lo es todavía más tras el asesinato por parte de Israel de más de 11 mil palestinos".
    Por eso, concluyó la investigadora, "en un contexto post conflicto, con un territorio transformado en una tierra desolada y sin una referencia estatal local, el modelo de Unifil no es replicable". (ANSA).