Masacre de trabajadores humanitarios, cien muertos

Eran empleados de la UNRWA. La ONU: "Basta de matanzas"

(ANSA) - ROMA, 10 NOV - Desde el comienzo del asedio israelí, en la Franja de Gaza más de 100 empleados de la UNRWA, la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos, perdieron la vida.
    Casi tres muertes diarias desde el pasado 7 de octubre: una "carnicería" que "simplemente debe terminar", escribió el comisario general de la UNRWA, Phillipe Lazzarini, en un editorial en el diario Washington Post.
    Lazzarini se muestra "devastado" y "de luto" por estos datos, que no son números sino "padres, profesores, enfermeros, médicos, personal de apoyo".
    Una tragedia a la que hay que poner fin, por lo que "es necesario un alto el fuego humanitario ahora", afirmó el director de la agencia.
    Pero no son sólo los empleados de la UNRWA los que están muriendo en la Franja: hace unos días la Organización Mundial de la Salud informó que más de 160 trabajadores de ese organismo perdieron la vida en el cumplimiento de su deber.
    Los hospitales de la Franja están colapsando, muchos ya han cerrado (21 según Hamás) y los pocos que aún funcionan luchan por seguir adelante sin medios de subsistencia ni combustible.
    El personal se ve obligado a trabajar con cientos de veces más pacientes de lo normal, a menudo en la oscuridad o, cuando se tiene más suerte, con la luz de un smartphone, ya que tampoco hay electricidad.
    Según Israel, los refugios de Hamás están escondidos debajo de las instalaciones sanitarias, por lo que serían atacados.
    "No podemos abandonar nuestras tareas, no podemos dejar sin ayuda a miles de víctimas y pacientes heridos", publicó en Instagram Ezudine Lulu, estudiante de medicina que trabaja en el hospital de Al Shifa, el más grande de toda Gaza: "Nos iremos vencedores o mártires", añadió.
    Midhat Saidam, asesinado la noche del pasado 15 de octubre, trabajaba en las mismas instalaciones.
    El cirujano de 47 años, informó la BBC, estuvo operando continuamente en Al Shifa durante una semana.
    Decidió hacer una pausa y volver a casa para descansar durante la noche, pero un bombardeo no le dejó escapatoria.
    La UNRWA "está ayudando a más de 700.000 personas en 150 de sus refugios", explica la directora de comunicación de la agencia de la ONU, Juliette Touma.
    "No tenemos suministros, no hay combustible: necesitamos un alto el fuego humanitario que nos permita operar" de la mejor manera posible, concluye Touma.
    La guerra entre Israel y Hamas es "la más dura y violenta jamás vivida" en términos de vidas humanas para los trabajadores humanitarios de la ONU. (ANSA).