Más de diez mil muertos en Gaza

Es "un cementerio de niños", dice el secretario de la ONU Guterres

Niños escapan de un bombardeo israelí en Gaza.  (foto: ANSA)
Niños escapan de un bombardeo israelí en Gaza. (foto: ANSA)

(ANSA) TEL AVIV - "Gaza se está convirtiendo en un cementerio de niños". El día en que las autoridades de Hamás anuncian más de 10.000 muertos en la Franja, "entre ellos 4.104 menores", las palabras del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, abren un nuevo enfrentamiento con Israel.
    "Qué vergüenza", respondió con brusquedad el ministro de Asuntos Exteriores del Estado judío, Eli Cohen.
    "Más de 30 menores, entre ellos un bebé de 9 meses, pero también niños y adolescentes que presenciaron los asesinatos a sangre fría de sus padres, están retenidos en la Franja contra su voluntad. Hamás es el problema en Gaza - tronó Cohen en la red social X- no las acciones de Israel para eliminar a esta organización terrorista".
    En la Franja dividida en dos por el avance del ejército y el asedio de la ciudad de Gaza, Israel continúa mientras tanto eliminando a los líderes de Hamás, identificando y destruyendo uno por uno los túneles de la facción, acreditada por varias fuentes por haber construido una red de más de 500 kilómetros en todo el enclave palestino.
    Jamal Mussa, jefe de las operaciones especiales de seguridad de Hamás, murió en redadas durante las últimas 24 horas.
    "En 1993 -explicó el portavoz militar- Mussa dirigió un ataque contra soldados israelíes que patrullaban en la Franja".
    En intensos ataques nocturnos en el norte (450 en total), el ejército dijo que había causado daños importantes a la infraestructura subterránea y de superficie y había matado a los comandantes que se escondían allí.
    Según el ejército, estas eliminaciones están perturbando las operaciones de Hamás. Mientras la facción islámica calificó de "mentiras" las afirmaciones israelíes de que los túneles están construidos bajo los hospitales de Gaza y utilizados como bastión para sus milicianos, invitando a la ONU a inspeccionar las clínicas de la Franja para verificar la realidad de los hechos.
    El ejército israelí respondió que había identificado y destruido complejos utilizados por Gaza para el lanzamiento de cohetes, incluido uno dentro de una mezquita. Luego añadió que había descubierto "más de 50 cohetes" en otra instalación "utilizada para actividades juveniles".
    En resumen, los combates continúan con gran intensidad pero aún hoy se abrió durante 4 horas un corredor humanitario a lo largo de la carretera Salah a-Din -que atraviesa toda la Franja- para permitir a los desplazados abandonar la parte norte de Gaza y dirigirse a la sur.
    Un intento de paliar la situación pero destinado a inundar aún más la zona sur del enclave. También sobre este tema intervino Guterres que, además de pedir un alto el fuego inmediato, instó a las dos partes en conflicto a respetar "las obligaciones del derecho internacional humanitario: esto significa, la liberación incondicional de los rehenes en Gaza, el cese del uso de civiles como escudos humanos y la rápida entrada de ayuda humanitaria" en la Franja, desde alimentos hasta combustible, que, sin embargo, se ve lastrada por el veto del premier israelí, Benjamin Netanyahu.
    Después de cuatro días, en tanto, Hamás desbloqueó el cruce de Rafah, permitiendo una vez más la salida a extranjeros y personas con doble pasaporte.
    Seis ambulancias que transportaban a palestinos heridos, según anunciaron fuentes en El Cairo, llegaron a Egipto y los pacientes fueron sometidos a pruebas médicas en la frontera antes de ser trasladados a los hospitales.
    "Por lo que a nosotros respecta casi todos los italianos, excepto los que querían quedarse, entre ellos un par de operadores de la Cruz Roja, han abandonado la Franja", anunció el responsable de la Farnesina, Antonio Tajani.
    Si el frente de Gaza sigue siendo el principal, el del norte entre Israel y el Líbano -sin olvidar la ardiente Cisjordania- está empeorando cada vez más.
    Según el Estado judío, Hezbolá disparó unos 30 cohetes, de los cuales 16 fueron reivindicados por Hamás.
    En respuesta, después de haber evacuado las zonas cercanas al Líbano, el ejército atacó el territorio libanés.
    Sigue siendo fuerte el temor de que el conflicto degenere y se extienda a todo el Medio Oriente. No es casualidad que Estados Unidos -hoy el presidente Joe Biden volvió a hablar con el primer ministro Netanyahu, insistiendo en "pausas tácticas" en los combates- haya anunciado el despliegue de un submarino nuclear de clase Ohio en la región.
    Finalmente, una vez que partió el secretario de estado, Antony Blinken, el jefe de la CIA, William Burns, llegó a Jerusalén. (ANSA).