(ANSA) - ROMA 3 NOV - Ríos desbordados, casas y comercios
inundados en zonas residenciales, sin electricidad y con
familias obligadas a abandonar sus hogares y viajar en botes
neumáticos. Ese es el cuadro en la Toscana (Italia) tras el paso
del ciclón Ciaran.
El gobierno ha decidido declarar el estado de emergencia
debido a las inundaciones que han afectado especialmente a la
Toscana en las últimas horas. La primera ministra, Giorgia
Meloni, anunció también la asignación de "cinco millones de
euros para las medidas más urgentes".
Actualmente, el saldo del mal tiempo provocado por la
furia de Ciaran, que arrasó gran parte de Italia con vientos de
entre 100 y 150 kilómetros por hora, como en Friuli y Cerdeña,
asciende a cinco muertos. En toda la Toscana, más de 20.000
personas se encuentran a oscuras y en algunos municipios no hay
agua: la ola de mal tiempo ha dañado la red eléctrica y también
las tuberías.
"Nunca había visto algo así en todos estos años. Para
nosotros, los de Quarrata, esta fue nuestra inundación en
Florencia en el 66", dijo Roberto Tramonti, socorrista
voluntario de la protección civil de Quarrata, uno de los
municipios de Pistoia más afectados en estos años. Horas después
de la tormenta Ciaran, traza a su manera una pequeña comparación
con el trágico acontecimiento que hace casi exactamente 57 años,
el 4 de noviembre de 1966, conmovió a la capital de Toscana.
Roberto, luchando con las bombas de agua para quitar el
barro y evacuar a las personas en dificultades, vio llegar a
otros voluntarios, bomberos, policías e incluso la unidad de
reconocimiento del 183 regimiento de paracaidistas de Pistoia.
Fueron lluvias "sin precedentes", explicó el gobernador
toscano, Eugenio Giani. "En cuatro horas, en algunos municipios
cayeron una media de 200 milímetros de agua: nunca tanta agua en
tan poco tiempo, ni siquiera en las inundaciones de 1966".
Incluso el alcalde de Quarrata, Gabriele Romiti, comentó
asombrado: "Somos el municipio donde ha llovido más intensamente
en la provincia de Pistoia, desde ayer se desbordó el torrente
Fermulla: nunca antes había sucedido, invadió el centro de la
ciudad, con casas y tiendas".
"En otro punto el torrente de La Stella se desbordó. Se
trata de daños importantes, una situación como ésta nunca se
había visto en setenta años", explicó el alcalde que inauguró la
villa Medici de La Magia, declarada patrimonio de la UNESCO,
para acoger a 15 familias de desplazados.
Y mientras que en 1966 las comunicaciones durante la
inundación se realizaban sólo por radio, hoy, después de más de
medio siglo, la información (videos de rescates, inundaciones e
informes) viaja en las redes sociales, llena de controversia.
"Llevamos casi 60 años recordando las inundaciones en
Italia, pero aparte de celebrar a los muertos y hablar, nunca
hacemos nada para prevenir y evitar que vuelva a suceder. Es
realmente muy triste", escribió Andrea Pecchia en X.
Y muchos tuitean: "Dejemos de lado la charla sobre el cambio
climático. Ya hubo una inundación histórica que lo arrasó todo".
Pero a lo largo de los años se han llevado a cabo una serie
de intervenciones que han ayudado especialmente a la ciudad de
Florencia. Entre ellos, la presa de Bilancino, con la seguridad
del Valdarno, aguas arriba de la capital florentina, y la
creación del lago artificial en Mugello, que puede contener
hasta aproximadamente 70 millones de metros cúbicos de agua. Sin
embargo, eliminar el riesgo, como siempre han subrayado los
técnicos, sería imposible.
El mal clima también impactó otras zonas de Italia. Este
viernes continuaban registrándose problemas en Lombardía con
violentas tormentas durante la noche y hasta primeras horas de
la mañana, antes de que saliera el sol en toda la región.
Pero eso es sólo una pausa porque mañana llegará una nueva
perturbación con precipitaciones generalizadas, vientos con
ráfagas de hasta 80-90 km/h y nieve por encima de los 1200
metros. Por ahora, el río Seveso ha aguantado, mientras que el
Lambro, en la provincia de Monza, se ha desbordado y el lago de
Como se ha desbordado desde ayer. Pero el Seveso es siempre el
que está bajo especial vigilancia después de las inundaciones
del pasado martes que invadieron las zonas del norte de Milán.
(ANSA).
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. © COPYRIGHT ANSA