(ANSA) - TEL AVIV, 16 OTT - El jefe del Shin Bet, el servicio
de seguridad interior israelí, Ronen Bar, admitió su
responsabilidad en la falta de previsión con la que Israel fue
sorprendido por el ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre.
"A pesar de una serie de acciones que emprendimos", escribió
Bar a los agentes, "para mi pesar, el sábado no pudimos dar
aviso suficiente para frustrar el atentado. Como jefe de este
organismo, la responsabilidad recae sobre mí".
Días atrás, también el jefe del Estado Mayor del Ejército,
el general Herzi Halevi, admitió que las Fuerzas Armadas no
estuvieron a la altura de las expectativas del país en esta
circunstancia. (ANSA).
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. © COPYRIGHT ANSA