Teherán teme protestas y objeta la decisión

Una bofetada al régimen tras el caso Armita que sacudió al país

El líder supremo el ayatolá Alí Jamenei (foto: ANSA)
El líder supremo el ayatolá Alí Jamenei (foto: ANSA)

(ANSA) - TEHERAN  - En las redes sociales vinculadas a la oposición iraní, muchos dicen que el régimen de ayatolá Alí Jamenei está presionando para en funciones las máquinas que mantienen con vida a Armita Geravand, de 16 años, que acabó en coma tras ser golpeada por los vigilantes del metro de Teherán tras una discusión porque ella no llevaba colocado el velo.
    Desde el domingo está hospitalizada en el hospital Fajr de Teherán, donde ayer se impidió a su madre Shahin Ahmadi entrar para verla. Después de sus protestas, ella también fue detenida.
    El temor de que la muerte de la joven pueda desencadenar una nueva ola de manifestaciones es muy grande, sobre todo después de que el comité Nobel haya concedido hoy el prestigioso Premio de la Paz a la activista iraní Narges Mohammadi. Una elección que Teherán ha definido como "sesgada y política".
    Hay muchas similitudes entre el caso de Armita y el de Masha Amini, pero lo que une a las jóvenes es sobre todo la valentía que las empujó a enfrentarse al régimen. Una característica que comparten con la nueva premio Nobel Mohammadi, arrestada 13 veces, condenada cinco veces y destinada a cumplir un total de 31 años de prisión por sus luchas en favor de las mujeres del país y de más allá.
    A pesar de las repetidas intimidaciones, ejecuciones y el constante deterioro de los derechos, muchas personas en el país chiíta todavía protestan ruidosamente y la concomitancia de estos dos hechos podría ser la gota que colma el vaso de nuevo, poco más de un año después de su muerte de Amini.
    Desde septiembre de 2022, desde hace meses miles de personas salen a las calles al grito de "Mujer, vida y libertad", pese a sufrir una represión sin precedentes, pero consiguiendo que el régimen afronte sus responsabilidades ante la comunidad internacional.
    En el último año la violencia no ha cesado. Amnistía Internacional, en un informe de agosto de 2023, informa que las autoridades han matado a "cientos de manifestantes" y "detenido a miles, incluidos menores", mientras que "innumerables otros han sido sometidos a torturas, incluida violencia sexual, durante su detención: algunos de ellos fueron ejecutado tras juicios manifiestamente irregulares".
    Pero el grito "Mujer, vida, libertad" sigue resonando en las calles de todo el mundo y hoy ha llegado a Oslo, donde Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Nobel noruego, repitió también el lema antes de anunciar el Premio Nobel concedido a el activista Mohammadi. (ANSA).