(ANSA) - BOLONIA 22 MAY - El sol está de vuelta en
Emilia-Romaña, y esto ya es una buena noticia para aquellos que
han estado paleando lodo en tierras inundadas durante días y
tratando de recuperarse.
El agua se está retirando en muchos de los centros más
afectados, pero todavía hay muchas situaciones difíciles para
ciudadanos y administradores que trabajan sin descanso.
El pueblo de Emilia Romaña persigue una normalidad perdida,
que desde hoy con la reapertura de las escuelas parece menos
inalcanzable.
De hecho, los alumnos de Cesena y Forlì están volviendo a
las aulas, aunque las escuelas secundarias todavía tendrán que
esperar, y desde mañana todos los servicios y todas las escuelas
para 0-13 años se reabrirán en Rávena.
Por tanto, incluso en Rávena, una de las zonas más
devastadas por el mal tiempo de los últimos días, adonde llegó
el domingo la premier italiana, Giorgia Meloni, tras haber
inspeccionado las provincias azotadas, la situación va mejorando
poco a poco: el tiempo es bueno y los niveles de los cursos de
agua tienden a disminuir.
Sin embargo, varios problemas críticos siguen vinculados a
grandes áreas aún marcadas por inundaciones. Las bombas de
vaciado están en acción en varias partes del área de Rávena. En
la aldea de Fornace Zarattini, sin embargo, los problemas
críticos siguen siendo evidentes. Lo mismo ocurre con Conselice.
La Unión de Municipios de la Baja Romaña subrayó que
"durante la noche el Municipio y Protección Civil continuaron, y
todavía están en marcha", los trabajos de consolidación del
terraplén en el lado derecho del Canal Reno y la estación de
bombeo en la localidad de Botte Santerno en Villa Pianta, además
de la otra estación de bombeo temporal construida cerca del
Reno".
En cualquier caso, se destaca, dada la delicada situación de
los terraplenes, "no es posible pensar en iniciar una acción de
bombeo hasta que estén consolidados. En consecuencia, la salida
de agua será inevitablemente lenta".
Pese a la mejora meteorológica, se ha renovado para mañana
la alerta roja en Emilia-Romaña, aunque la zona se está
reduciendo, dado que la alerta pasa a naranja por los derrumbes
en los Apeninos.
Para mañana no se esperan más lluvias ni aumentos en el
nivel de los ríos, actualmente en lento descenso. (ANSA).
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. © COPYRIGHT ANSA