Aníbal Gaviria, gobernador de Antioquia, lamentó el atentado y ofreció 50 millones de pesos (unos 11 mil dólares) de recompensa por "información efectiva que permita dar con los responsables" del ataque, que prometió que no quedará impune.
La Policía realizaba anoche el desalojo de un predio ocupado de manera ilegal, cuando detonó al parecer una bomba molotov, en medio de una confrontación con varias personas que impedían el procedimiento de las autoridades.
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