Los tres vehículos de carga ingresaron de manera irregular a Chile durante la madrugada del sábado, dos de ellos no contaban con placa patente y provenían de Bolivia.
El procedimiento se llevó a cabo en los poblados de Pisiga Choque y Pisiga Carpa de la localidad fronteriza de la provincia del Tamarugal, según consignó radio Bío Bío.
La carga, avaluada en más de 64 mil dólares, estaba escondida dentro de cajas y bultos al interior de los camiones.
Hasta la fecha se han incautado nueve camiones, cuatro de ellos de origen boliviano, según informó la Aduana.
En los nueve camiones, se interceptaron 306 rifles y 55 pistolas calibre 5.5 de aire comprimido. Además, 1.245 fardos de ropa usada, 50 toldos, 600 discos duros, 564 chaquetas de pluma, 16 computadores y 15 celulares.
"Hemos incautado mercancías que bordean el medio millón de dólares", reconocieron desde la Aduana.
El 19 de marzo, ya habían sido confiscados 136 rifles de aire comprimido por el Ejército de Chile en la misma localidad fronteriza de Colchane.
El comandante de la jefatura de área de zona fronteriza de la región de Tarapacá, Ramón Oyarzún, señaló que "ésta es una muestra más de lo que se ha logrado con el trabajo mancomunado que venimos realizando".
La delegada presidencial provincial de Tamarugal, Luz González, destacó la presencia del Ejército en la zona fronteriza, indicando que "es positiva, no solo por la migración irregular, sino que también para combatir bandas de crimen organizado, detectando a los líderes y acciones de estas células delictivas".
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