El monasterio está ubicado en el milenario complejo de la Kyiv Pechersk Lavra, con vistas a la orilla del Dniéper, lugar considerado sede de la Iglesia Ortodoxa leal al Patriarcado de Moscú que, a finales de 2022, pasó a estar bajo la jurisdicción de los ucranianos y encomendado a la Iglesia ortodoxa autocéfala ucraniana.
"No somos colaboradores, somos ciudadanos de nuestro estado, somos personas que vivimos aquí desde 1988, muchos no tenemos otro lugar que aquí. Nadie nos puede arrancar del amor de Dios", concluyen los religiosos en el video.
Hace dos días, el patriarca de Moscú, Kirill, había lanzado un llamamiento al papa Francisco, al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y a la comunidad internacional para evitar la expulsión de los religiosos de la Iglesia ortodoxa ucraniana que permanecían fieles a Moscú.
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