El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, determinó que el principal organismo de inteligencia quede bajo la supervisión de un ministro civil y deje de estar bajo la órbita militar.
    El Diario Oficial de la Unión publicó hoy que la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN) dejará de estar subordinada al Gabinete de Seguridad Institucional (GSI) y quedará dentro de la órbita de la Casa Civil, cuyo titular es el ministro Rui Costa.
    Según trascendidos, el futuro titular de la ABIN será el comisario Luiz Fernando Correia, quien comandó la Policía Federal durante el anterior gobierno de Lula.
    La medida se conoce casi dos meses después de la invasión del Palacio del Planalto, sede de la Presidencia, por parte de simpatizantes del expresidente, Jair Bolsonaro, defensores de un régimen militar.
    Lula declaró que hubo "connivencia" de algunos militares en ese intento de golpe de Estado mientras los mandos del GSI, pertenecientes en su mayoría al Ejército, fueron "omisos" ante la nvasión del Planalto ocurrida el 8 de enero.
    Además, el Supremo Tribunal Federal lleva adelante una investigación sobre la presunta complicidad o pasividad de los militares a cargo de la seguridad del Planalto.
   

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