El vocero de Defensa Civil de San Pablo, Roberto Farina, actualizó las cifras de muertos y desaparecidos e informó que la tarea de los rescatistas es "arriesgada" por la cantidad de agua "acumulada que aumenta el riesgo de nuevos deslizamientos".
Los deslaves de lodo y las inundaciones afectaron a barrios humildes ubicados en los morros por lo que más de 2,5 mil personas debieron dejar sus viviendas.
Farina comentó que hoy a la madrugada hubo una lluvia de baja intensidad en la Sao Sebatiao, ciudad donde se registraron 39 de las 40 víctimas fatales, mientras la restante fue consignada en Ubatuba.
En Sao Sebastiao se reunieron ayer Lula y el gobernador paulista, Tarcisio de Freitas,quienes acordaron trabajar de forma conjunta a pesar de sus divergencias políticas.
"El bien común del pueblo es más importante que cualquier diferencia,es posible que cumplamos nuestra función en democracia aunque pertenezcamos a partidos diferentes",dijo Lula dirigiéndose a Freitas, un opositor aliado del expresidente Jair Bolsonaro.
Por su parte, Freitas pidió a las decenas de miles de turistas que se encuentran en las ciudades de la costa pasando el feriado del Carnaval evitar volver a la capital San Pablo y otros destinos debido a que parte de las carreteras están bloqueadas por los aludes.
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