(ANSA) - CARACAS 13 FEB - Trabajadores de educación y salud
junto a otros gremios de la administración pública
protagonizaron hoy una nueva protesta en Caracas y en otras
ciudades del país, para seguir exigiendo aumento salarial al
gobierno de Nicolás Maduro.
Los manifestantes se concentraron en la avenida Fuerzas
Armadas, al norte de esta ciudad, y pretendían llegar hasta la
sede del ministerio de Educación, pero piquetes de la Policía
Nacional Bolivariana (PNB) bloquearon el paso.
Además, una actividad proselitista se desarrolló al frente
del ministerio.
Al grito de "cuál revolución si este gobierno es hambre
miseria y corrupción",
los trabajadores cambiaron la ruta con la intención de llegar
hasta la Asamblea Nacional, pero de nuevo cuerpos de seguridad
lo impidieron.
En medio de la frustración de los manifestantes por no poder
avanzar, una comisión de diputados del Parlamento 2020 llegó al
lugar y prometió que atenderán sus planteamientos en una próxima
reunión.
Eduardo Sánchez, presidente del Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Universidad Central de Venezuela, lamentó la
falta de respuesta del Ejecutivo a los reclamos salariales.
"El gobierno no ha dado su brazo a torcer, no reacciona, la
indolencia oficial no nos permite cambiar los mecanismos de
lucha. Hay más de 360 mil personas movilizadas en todo el país
por el salario", afirmó.
Precisó que, a las peticiones de aumento salarial con
indemnización, los contratos colectivos, libertad para todos los
trabajadores presos, indexación de las prestaciones sociales, y
seguridad social, se le suma el rechazo a la Ley de
participación Estudiantil en el Subsistema de Educación Básica
que aprobó la Asamblea Nacional el 7 de febrero de este año.
"Esa ley es una intromisión en los asuntos internos
estudiantiles. Debe derogarse", exigió.
Asimismo, Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de
Profesionales de Enfermería del Distrito Capital, repudió la
referida ley que dijo "pretenden colocar
estudiantes sin ningún tipo de preparación a dar clases".
"Lo mismo pretendieron hacer en el sector salud, colocar
personas que por saber inyectar no son médicos ni enfermas",
fustigó.
Por otra parte, destacó que el problema de los bajos
salarios afecta a todos los trabajadores públicos que "estamos
en una suerte de esclavos del siglo XXI".
"Unos salarios que no nos permiten tener calidad de vida.
Como vamos a vivir con 5.38 centavos de dólar, por eso no
podemos permitir que se vulnere la constitución con un mal
llamado salario de emergencia", enfatizó.
En este sentido, dijo que pueden aceptar un "bono en 200 o
300 dólares mientras se establece el salario porque el costo de
la cesta básica ya supera los 1.000 dólares".
"Insistimos en el llamado a Maduro, vamos a seguir en las
calles hasta tanto el Estado asuma su responsabilidad y nos dote
de un salario suficiente", advirtió. (ANSA).
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