Alessandro Gassmann, Redes alimentan ojo por ojo

El actor de 57 años interpreta a un ex asesino de la "ndragheta"

Alessandro Gassmann en
Alessandro Gassmann en "Il mio nome é vendetta" (ANSA) (foto: ANSA)

(ANSA) - ROMA 30 NOV - El actor Alessandro Gassmann, hijo de Vittorio Gassman, afirmó que las redes sociales alimentan el "ojo por ojo".
    El actor de 57 años interpreta a un exasesino de la "ndragheta", aparentemente "aplacado" por una segunda vida familiar, que tendrá que enfrentarse a su pasado en un intento por salvar a su hija.
    Es el personaje de Gassmann en "Il mio nome è vendetta", la película de Cosimo Gomez, con Ginevra Francesconi, Remo Girone, Alessio Praticò, Marcello Mazzarella, Mauro Lamanna, Sinja Diecks, que se estrena hoy en Netflix.
    "En la vida no me considero una persona vengativa, de hecho me considero un muro de goma", dijo el actor hablando de la confrontación con el protagonista de la película, producida por Colorado que, sin embargo, reconoce "que se enfada".
    "Creo que la animosidad, la agresividad sobre todo la oculta en las redes sociales ha aumentado en la sociedad contemporánea un sentido de ojo por ojo que siempre está fuera de lugar", añadió el actor. "Lo bueno del cine es poder explorar estos sentimientos, no hacer daño a nadie".
    El actor y director italiano, hijo de la actriz francesa Juliette Mayniel, se considera un gran amante del cine de género: "Soy un aficionado a la ciencia ficción, especialmente la japonesa de los años 50 y 60, pero también de terror y thriller de acción, Para mí participar en una película como esta fue un pequeño sueño".
    Gassmann interpreta a Santo, un ex implacable asesino de la 'ndragheta en medio de su tranquila segunda vida en el Tirol del Sur, con su esposa e hija adolescente Sofía (Francesconi).
    Todo se desmorona cuando dos delincuentes entran en la casa y matan a su esposa. Santo inicia así su camino a la venganza, junto a su hija, obligada a enfrentarse al pasado de su padre y a una violencia sin frenos de la que debe aprender a defenderse.
    "Estoy muy contento con el proyecto", añadió Gassmann. "En muchos sentidos es una novedad para Italia, una película de pura acción y de una calidad muy rara" también gracias a la cuidadosa preparación de las escenas de acción, con el coordinador de acrobacias Emiliano Novelli.
    Santo es "un hombre que se ha rehecho la vida, con un pasado doloroso y violento que ha borrado", dijo.
    Una trama típica de película de venganza, "en la que una persona peligrosa debe ponerse en acción y resolver una situación no siguiendo las reglas civiles".
    "Quiero mucho a Santo, es un personaje con un pensamiento sencillo... pero por favor no hagas lo que hace él", aclaró entre sonrisas.
    El reto para Gassmann fue también la parte física: "Me puse en forma para la película, se necesitaría uno al año".
    Aseguró que se divirtió mucho con la experiencia, a pesar de un pequeño incidente en el plató ("un ojo negro").
    La idea de "Mi nombre es venganza" nació con Alessandro Usai. (ANSA).