(ANSA) - ROMA 10 NOV - "Tori y Lokita", el nuevo film de los
hermanos Jean-Pierre e Luc Dardenne, presentado hoy en Roma,
relata lo que les ocurre a muchos jóvenes inmigrantes sin
familia que llegan a la Europa civilizada.
"No queríamos hablar de dos inmigrantes, sino de dos seres
humanos. Sabemos que en Europa hay mucha gente que siente miedo
y odio hacia ciertas cosas, pero también hay quienes se
preocupan por la hospitalidad. Y nosotros, como directores,
estamos del lado de los que tienen confianza y esperanza",
afirmaron hoy Jean Pierre y Luc Dardenne, en Roma, donde el film
tendrá su estreno el 24 de noviembre.
Se trata de una película sin demasiadas esperanzas, oscura y
con tintes melodramáticos que ya compitió en Cannes, donde
recibió el premio del 75 aniversario, y que ahora se distribuye
en Italia con Lucky Red a partir del 24 de noviembre.
Los realizadores belgas hicieron también una referencia al
reciente y complicado desembarco en Catania de inmigrantes de
barcos de ONG.
"Las palabras 'carga residual' del ministro del Interior
italiano, Matteo Piantedosi, son terribles. El cine, en algunos
casos, puede cambiar las cosas porque permite con su mensaje
dirigirse a una audiencia que, sentada en una sala, finalmente
se toma un descanso y tiene una mayor capacidad de escuchar",
expresaron.
Ambientada en la Bélgica actual, la película cuenta la
historia de un preadolescente, Tori (Pablo Schils) y una
adolescente, Lokita (Joely Mbundu), que llegaron solos de
Africa.
Un poco hermanos y un poco familia, estos dos muchachos
tienen dos prioridades: tener documentos franceses y enviar
dinero a casa. Ahora, para hacer esto, ambos necesitan dinero,
así que no son demasiado exigentes.
Entonces, Tori y Lokita ingresan a la industria de las
drogas, sufriendo todo tipo de violencia, fortalecidos solo por
su amistad.
"Lokita, una adolescente, y Tori, poco más que un niño,
ambos vienen de Africa: Camerún y Belin. Para ellos, la amistad
no significa solo estar ahí uno para el otro, sino ayudarse
mutuamente a pagar a los traficantes, a regularizar su
situación, encontrar trabajo en el mercado negro, enviar dinero
a las familias... también significa no poder vivir el uno sin el
otro, quererse como hermano y hermana, formar una familia para
no estar solos con sus pesadillas, consolarse con un gesto, una
palabra o una canción, para no hundirse en la soledad y los
ataques de pánico", detalló uno de los realizadores.
Los Dardenne afirmaron que la idea de la película surgió "no
de una noticia precisa, sino de las muchas noticias que
relataron sobre tantos inmigrantes menores de edad finalmente
desaparecieron en el aire".
"Esperamos que al final de nuestra película el público
sienta una profunda empatía por los dos jóvenes exiliados y su
amistad inquebrantable. Pero que, al mismo tiempo, quiera
rebelarse contra las injusticias que reinan en nuestras
sociedades", concluyeron. (ANSA).
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