Sabina, de adolescencia a vejez, sin madurez

(ANSA) - SAN SEBASTIAN, 17 SET - Bajo la premisa de que "un artista no debe tomarse en serio a sí mismo", Joaquín Sabina muestra su alma en el documental "Sintiéndolo mucho", de Fernando León de Aranoa, presentado hoy en el Festival de cine de San Sebastián.
    Sabina anunció nuevo disco para Navidad junto con Leiva y gira por América Latina a partir de febrero próximo.
    El cineasta comenzó a grabar el documental hace 13 años, cuando el cantante le propuso acompañarle a él y al escritor Benjamín Prado, que iban a escribir las letras de uno de los discos de Sabina, y le invitó a llevar una cámara.
    "Lo primero que hice fue decirle que no necesitaba llave para entrar en ningún sitio, que me grabara cagando", comentó el cantante.
    "Se trataba de estar en muchos momentos vivos, más allá de conversaciones con él", dijo hoy Aranoa ("El buen patrón") en la presentación.
    Son momentos como los minutos antes de salir a dar un concierto, una gira por México, donde además de cantar vio torear a José Tomás en una corrida en la que recibió una cornada, cuando cantaba en su casa en compañía de los miembros de su banda, o cuando se cayó en el concierto de Madrid de febrero de 2020.
    También aparece en Ubeda (Jaén, sur del país), su ciudad natal, cuando se le rindió un homenaje y el cantante leyó un verso escrito para él por su padre quien, al igual que su madre, no alcanzaron a ver la fama del hijo, lamentó Sabina.
    "El artista debe tomarse muy en serio lo que crea por respeto al público, pero no debe tomarse en serio a sí mismo para nada. Ese es el fin de la creación artística" y de "la solemnidad hemos huido como de la peste" en este documental, advirtió.
    Respecto a su voz ronca, Sabina bromeó diciendo que "la gente que oye un disco mío se siente muy feliz porque piensa que canta mejor que yo" y que "una vez estuve mejor de voz y la casa de discos me dijo que así no vendíamos un disco".
    A sus 73 años, Sabina dice en la cinta tener "la sensación de que he pasado de la adolescencia a la vejez sin tocar la madurez".
    Además, confirma que está consiguiendo "envejecer sin dignidad", tal como se propuso.
    Dice también que "sin desamor no se pueden hacer canciones" porque "las canciones buenas de amor son en realidad de desamor".
    Ahora que tiene una apacible "vida doméstica, no se me ocurre nada que escribir. ¡Estoy loco por que me deje la Jime (Jimena, su esposa) y así escribiría todo un disco!", bromeó.
    Tardó "mucho" en hacer canciones de amor, pues en los cuatro primeros discos no hay, apuntó luego. Para él su "ejemplo máximo de las canciones de amor, por el lado cursi y decadente, es José Alfredo Jiménez", completó.
    Un poema, desgranó, "no aguanta la cursilería, pero a las canciones les viene bien ese punto de cursilería de José Alfredo". Asimismo, describió la vida en los escenarios al inicio de su carrera como "algo más que la vida", mientras que 20 años después "te conviertes en un empresario de quien dependen 20 familias".
    Sabina pidió, además, la "pena de muerte para el inventor del móvil con cámara" por la cantidad de fotos que le toman.
    El cantante confesó ser "mucho más pudoroso de lo que dice mi caricatura" y comentó que su esposa le dijo que Aranoa, gran amigo suyo desde hace años, "me ha sacado hasta el alma en el documental".
    En la cinta Sabina (letra) y Leiva (música) componen una canción inédita, "Sintiéndolo mucho" pues "Fernando merecía que le hiciéramos un regalo" después de que "nos ofreció una maravillosa manera de salir de tanta tristeza" causada por la pandemia, reveló. Sabina reveló que junto con Leiva, después del disco que hicieron juntos, "Lo niego todo" (2017), "ya he compuesto más canciones y espero sacar el disco para Navidad". Por último, anunció que a finales de febrero comenzará por América Latina una gira, que después le llevará a España y posteriormente volverá al continente americano. (ANSA) .