Para evitar esta pérdida, el patrimonio varietal del olivo se conserva en colecciones de árboles vivos, como una especie de Arca de Noé, presentes en Umbría en Lugnano en Teverina, en Toscana en Follonica, en el campo Zagaria de la Reserva de Pergusa (Enna) y también en Marruecos en Marrakech (Inrae) y en España en Córdoba (Ifapa).
En Umbría, la cultura del aceite es tan específica que a cada recién nacido y a cada extranjero (muchos estadounidense y alemanes ya han tenido uno) que decide vivir en Lugnano in Teverina, un pueblo umbro en las colinas amerini, se le asigna un olivo. en ese lugar, las excavaciones arqueológicas en curso atestiguan la presencia de olivos en una villa romana, con hallazgos que atestiguan la elaboración de la aceite desde el siglo I.
Tanta historia, pero también una mirada visionaria al futuro que encuentra forma concreta en Olea Mundi, la colección mundial de olivos nacida gracias a un proyecto de la Universidad de Perugia, Región Umbría, 3A y el Parque tecnológico agroalimentario de Umbría.
La colección incluye 400 variedades de olivo replicadas en tres ejemplares de cada especie para un total de aproximadamente 1.200 árboles. Aquí la administración municipal y la comunidad agrícola local han puesto a disposición gratuitamente diez hectáreas.
Los investigadores del Centro Isafom y del ente de investigaciones de Perugia han extraído el ADN de cada una de las tres réplicas presentes de unas 400 variedades entre las más importantes de los diferentes olivos para caracterizar su comportamiento bio-agronómico también ante los cambios climáticos y para probar su tolerancia a la sequía y al frío.
La colección Olea mundi se puede visitar durante los itinerarios "Evo&Art Experience" promovidos por la Strada dell'Olio Dop Umbria durante los "Frantoi aperti" en el Colli Amerini, la más pequeña de las subzonas Dop Umbria con un cultivo raro, el Rajo, una planta longeva y monumental.
"Es una planta complicada de gestionar porque es muy grande y se recolecta tarde, pero tiene un gran valor paisajístico", detalla Paolo Morbidoni, presidente de la Strada dell'Olio Umbria. "Normalmente empieza a producir después de 10-12 años", acota.
Un contraste, pues las nuevas plantas después de dos o tres años ya están empezando a entrar en producción. Es una inversión a largo plazo, pero aquí hay muchas plantas centenarias y un patrimonio único y es un cultivar verdaderamente autóctono que caracteriza a la subzona de los Colli Amerini y soporta bien este clima húmedo cerca del río.
"Además. da un aceite que tiene una complejidad interesante, con notas amargas y picantes bastante atenuadas, por lo tanto muy equilibrado", explica Morbidoni.
Para Francesca Peppucci (Grupo Forza Italia-PPE), que como eurodiputada especializada en el tema promovió hace un año un debate a nivel europeo, "las colecciones mundiales de especies de olivo representan un gran motor para los territorios que las albergan y representan la suerte de poder expresar estas excelencias". "Además de garantizar la investigación, el estudio y la conservación de la biodiversidad, son una herramienta importante que puede ponerse al servicio de las escuelas, las universidades y los numerosos turistas interesados ;;en el mundo del óleo", añadió la legisladora.
El aceite de oliva, recuerda Coldiretti -la asociación de consumidores-, representa un sector estratégico para el sector agroalimentario del Made in Italy, gracias al compromiso de aproximadamente 400 mil empresas agrícolas nacionales para garantizar un producto con estándares muy altos, con un patrimonio de 250 millones de plantas y 533 variedades de aceitunas, el mayor tesoro de biodiversidad del mundo.
Italia ostenta el liderazgo en Europa en cuanto al mayor número de aceites de oliva vírgenes extra con denominación en Europa (43 DOP y 7 IGP).
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