(ANSA) - Nunca ha habido tan poco pan en las mesas de los italianos: el consumo se ha desplomado a un mínimo histórico de sólo 80 gramos por persona al día, con el adiós a una barra de cada tres (-33%) en poco más de una década.
Del trigo al pan, el precio aumenta más de 17 veces teniendo en cuenta que para hacer un kilo de pan se necesita alrededor de un kilo de trigo, del que se obtienen 800 gramos de harina que se mezcla con agua para obtener un kilo de producto terminado, con una gama nunca antes tan amplia.
Así lo revela un análisis de Coldiretti sobre la inflación media en los ocho primeros meses del año realizado por Istat, publicado en el Farmers' Village de Roma con motivo del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra el 16 de octubre.
Coldiretti informa que el consumo se ha desplomado hasta alcanzar un mínimo histórico, a apenas 80 gramos por persona al día, con una caída del 33% en poco más de una década.
"La disminución de las compras -subraya la organización- se ha acelerado en los últimos años con el consumo de pan que en 2010 era de 120 gramos por persona y día, en 2000 de 180 gramos, en 1990 de 197 gramos y en 1980 de alrededor de 230 gramos, que son valores, aunque muy alejados de los de la Unificación de Italia en 1861, en la que se consumían 1,1 kilos de pan por persona y día".
Por lo tanto, la disminución del consumo también pone en peligro la supervivencia de los panes tradicionales italianos, entre los que se encuentra en Molise el preciado elaborado con trigo "Senatore Cappelli".
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