En respuesta a las preguntas de los accionistas con motivo de la asamblea del 10 de mayo, la empresa manifestó que el objetivo es alcanzar una capacidad instalada de más de 7 gigavatios a finales de 2026, consolidando su presencia en este sector en países como Italia, España, Francia, Estados Unidos y Reino Unido.
Este crecimiento, según ENI, se producirá principalmente a través de “el desarrollo de proyectos orgánicos y, en menor medida, a través de operaciones de adquisición seleccionadas”.
En 2022, las inversiones de la compañía en iniciativas bajas y cero emisiones de carbono ascendieron a 1.200 millones de euros, en torno al 14% del total.
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