"Por hacer malabarismos en todas las disciplinas se acaba sacrificando la calidad", argumentó Shiffrin en una rueda de prensa online.
La estadounidense, que suma 97 victorias en la Copa del Mundo, 60 de ellas en "slalom" y 22 en "slalom gigante", pretende encontrar calidad también en "Super G" dedicándole más entrenamiento y dejando de lado el estilo libre.
"Lo digo y lo repito, no quiero hablar de récords, no quiero pensar en ellos. Me sorprende pero también es positivo que haya gente que se sienta motivada por estos objetivos", refirió Shiffrin sobre la posibilidad de llegar a 100 victorias.
"Siento menos presión porque me emociona que el público se interese, así que haré lo mejor que pueda porque quiero estar en buena forma y seguir luchando por las victorias", completó Shiffrin.
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