La decisión de la UEFA de quitarle la sede de la final de la Champions de 2027 a Milán por falta de garantías encendió, además de una polémica con tintes políticos, alarmas en relación con la Eurocopa que Italia albergará en 2032 conjuntamente con Turquía.
Mientras el Estadio Olímpico de Roma se postula como escenario alternativo al Giuseppe Meazza para la final del torneo continental de clubes ("Ya le expresamos a la federación italiana nuestra disponibilidad", afirmó Alessandro Onorato, asesor de Grandes Eventos de la capital), las actuales condiciones de los estadios italianos son otro tema a tener en cuenta.
"Es algo sobre lo que debemos reflexionar pensando en la Eurocopa de 2032, cuyos compromisos y obras refieren a otros estadios que es necesario construir", destacó el presidente del Comité Olímpico Italiano (CONI), Giovanni Malagó.
"No me animaría a decir que estamos en peligro de perder la sede de la Eurocopa, pero somos campeones perdiendo el tiempo y luego corriendo carreras para recuperarlo. Si al menos una vez supiéramos planificar con antelación, como sucede en otros países, sería una gran cosa", agregó el directivo.
El debate político se agitó con las declaraciones del alcalde de Milán, Giuseppe Sala, quien hoy reiteró: "Fui yo quien le comunicó la UEFA que no estaba en condiciones de garantizar que las obras en San Siro iban a quedar completadas a tiempo" para la final de la Champions en 2027 porque Milan e Inter optaron por descartar una remodelación debido a los altos costos.
"No podía hacer otra cosa, a menos que alguien asumiera la responsabilidad, pero eso iría en contra del camino que estamos recorriendo junto con Inter y Milan", explicó Sala al aclarar también que el "contrato de alquiler del Giuseppe Meazza que la comuna de Milán tiene vigente con ambos clubes caduca en junio de 2030 y si están pensando en mudarse no puedo suponer que será renovado".
En ese caso, dijo, como Milan e Inter están considerando construir nuevos estadios en San Donato y en Rozzano, Sala anticipó que a partir de esa fecha será la comuna intentará alquilarle el Meazza a aquellos interesados en utilizarlo para la realización de conciertos porque -explicó- "de otro modo estaríamos generándole un daño a la comunidad".
Sala le apuntó al presidente del Senado, Ignazio La Russa, al comentar que "vino a mí con la idea de construir dos nuevos estadios y me da la impresión de que conversó con ambos clubes, pero no logró nada en ese sentido. Especular con un tema que afecta a la ciudad me resulta impropio para alguien que ocupa su cargo".
El partido Forza Italia en Milán anticipó que presentará "un recurso ante el Tribunal de Cuentas para que cuantifique el daño a las arcas comunales" que representa esta situación, informó el consejero municipal Alessandro De Chirico.
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