"Es una constante en mi carrera convertir un gol cuando debuto en un nuevo equipo, pero lo más importante hoy es que ganamos", resumió el belga Romelu Lukaku, quien en su estreno con la casaca del Napoli convirtió el primer gol en el triunfo agónico por 2-1 frente al Parma.
"Es un honor para mí jugar en este equipo, con estos compañeros y ante estos aficionados", agregó el delantero que llegó en el cierre del mercado de pases desde Chelsea y tras haber jugado en la Roma en la pasada temporada.
"Los muchachos me recibieron muy bien. Trabajamos duro y las charlas en los entrenamientos rindieron fruto", explicó Lukaku, quien realizó apenas dos prácticas con el plantel que dirige Antonio Conte.
"Estoy feliz de volver a jugar a sus órdenes", dijo al respecto el belga, que había sido dirigido en el Inter campeón de la temporada 2020-21 por su actual entrenador, artífice de su llegada al Napoli.
"Ahora debemos bajar la cabeza y seguir trabajando, como él dice. El camino apenas comienza", completó el goleador, que marcó el empate en tiempo de descuento antes de que el camerunés André Zambo Anguissa le diera el triunfo a un Napoli que había comenzado perdiendo de local.
"Más allá de la victoria, que nos pone contentos, debemos mejorar", reconoció Conte, quien aludió también a "las dificultades que genera un mercado de pases abierto hasta la tercera fecha del campeonato. Algo que debería cambiar", afirmó.
"Jugamos este partido con un plantel acotado, con sólo dos mediocampistas netos", dijo al respecto, al destacar también los contratiempos que provoca la doble fecha FIFA, que obliga a ceder jugadores a sus selecciones nacionales.
"Por suerte tenemos a Lukaku", agregó sin dejar de lado la difícil situación del nigeriano Victor Osimhen, quien finalmente no fue transferido como esperaba y no formó parte del plantel del Napoli.
"Lo lamento por él, que está inactivo, y por el club, porque con su venta hubiese ingresado dinero para sumar más refuerzos, pero reconozco que Napoli ha hecho importantes inversiones", afirmó.
Su colega Fabio Pecchia, en tanto, consideró que de no haber sido por la expulsión del arquero estadounidense nacionalizado japonés Zion Suzuki a 15 minutos del final y cuando su equipo estaba en ventaja, "Parma merecía ganar".
"Considerando las ocasiones que generamos, si no hubiésemos terminado con diez jugadores, creo que pudimos haberlo ganado sin dudas. El haber agotado los cambios cuando expulsaron al arquero nos condicionó, pero no tengo nada de que arrepentirme más allá de la derrota", explicó.
"Jugamos un gran partido y debo felicitar a mis jugadores porque nos vamos sintiéndonos ganadores, aunque no hayamos sumado puntos frente a un equipo que invirtió mucho dinero para tratar de pelear por el título", destacó Pecchia.
El técnico que llevó a Parma de regreso a primera división, consideró escasa la cosecha de cuatro puntos en tres fechas disputadas, pues a la derrota agónica de hoy habría que sumar el empate frente a Fiorentina en el estreno en un partido que su equipo parecía tener ganado.
"Estos chicos tienen que seguir creciendo jugando como suelen hacerlo, sin especular. Me llevo buenas sensaciones del estadio (Diego) Maradona, pero vuelvo a casa con el fastidio de la derrota".
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