La contaminación del río Sena obligó a cancelar también hoy las prácticas para las competencias de natación en aguas abiertas de los Juegos Olímpicos de París.
Es la quinta vez en esta edición que se registra esta situación debido a que la "aguas no son aptas para la práctica de la natación", según informaron los organizadores.
La contaminación del Sena es uno de los temas que generó polémica en estos Juegos y seguramente seguirá dando que hablar una vez que finalicen, como sucedió con la ceremonia de apertura que tuvo al emblemático río como escenario de la misma.
El de hoy es el quinto entrenamiento cancelado en lo que va de la cita, como había sucedido con los de triatlón, cuya prueba masculina debió ser postergada por un día por idénticos motivos.
Ahora, quedó en duda la disputa de las competencias de natación en aguas abiertas, entre ellas la de 10 kilómetros femeninos, prevista para del jueves, y la masculina, que debería correrse el viernes.
Según se informó, la contaminación se produce por efecto de las lluvias que cayeron sobre París en las últimas jornadas y que impiden que las aguas del Sena escurran como deberían en una situación normal.
Eso provoca que los residuos cloacales se acumulen y se eleven los niveles de bacterias como la "escherichia coli" y el "enterococcus", lo que representa un grave riesgo de contagio a los competidores.
En ese sentido, hoy se informó que la triatleta belga Claire Michel, internada desde que se sumergió en las aguas del Sena hace cinco días, no contrajo "escherichia coli", como se presumía.
"Los exámenes de sangre demostraron que contraje un virus (no escherichia coli)", aclaró en primera persona la propia Michel, que ya fue dada de alta.
"Después de tres días con vómitos y diarrea, que me debilitaron mucho, el domingo necesité someterme a un tratamiento médico en una clínica", explicó.
La atleta belga, que se sintió mal después de haber competido en la prueba realizada en el Sena, destacó que "se dieron a conocer informaciones contrastantes que necesitaba aclarar".
De paso agradeció al "cuerpo médico del equipo belga y a todos los doctores y enfermeras del centro que funciona en la Villa Olímpica" y para llevar tranquilidad aseguró: "Estoy mejorando gradualmente y hoy regresé a Bélgica".
Debido a lo sucedido con Michel, el equipo mixto belga de relevos en la prueba de triatlón optó por no presentarse a competir.
"Mi corazón está con mis compañeros, que perdieron la oportunidad de competir", se lamentó Michel al destacar que "Bélgica es un país relativamente pequeño, pero con mucha tradición en las competencias de relevos en las distintas disciplinas".
"Nuestro proyecto se había iniciado en Tokio (2021, Ndr) y queríamos mejorar nuestra actuación para inspirar a las futuras generaciones", agregó la deportista al agradecer también las muestras de apoyo recibidas.
En relación con la cancelación de los entrenamientos para las competencias de aguas abiertas, el Comité Organizador de los Juegos y el Comité Olímpico Internacional (COI) informaban más temprano que las aguas del Sena eran aptas.
Fue al afirmar que los niveles de "escherichia coli" y el "enterococcus" eran "demasiado bajos en los tres puntos en los que se tomaron muestras".
"Sólo un valor resultó superior al tope establecido, pero está alejado del lugar de las competencias", decía Anne Descamps, a cargo de la Comunicación de los Juegos parisinos en conferencia de prensa.
Al ser consultada por la cancelación de los entrenamientos de esta mañana, Descamps explicó que "se trataba sólo de una práctica para que los atletas se familiarizaran con el agua y aún no teníamos los resultados de las muestras del lunes".
Por ese motivo, indicó, la Federación Internacional de natación (World Aquatics), que es la que tiene la última palabra, fue la que decidió anularlos "por precaución" al analizar los últimos datos disponibles.
Descamps aclaró que al recibirlos, alrededor de las 10,30 locales, resultaron ser "muy satisfactorios" y por eso las competencias pueden desarrollarse tal como estaban previstas.
El presidente del Comité Olímpico Italiano (CONI), Giovanni Malagó, terció en la controversia al afirmar que "una cosa es una carrera corta, como en el triatlón, y otra una competencia de 10 kilómetros".
"Estamos ante una situación límite", agregó el dirigente, aún cuando se dijo "confiado, al punto que solicité, como miembro del COI, participar en la ceremonia de premiación de esa prueba".
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