El partido previsto en el Pierre-Mauroy de Villeneuve-d'Ascq, periferia de Lille, enfrentará al seleccionado del país más rico del mundo contra el representativo de la nación más pobre del planeta, que presenta la mortalidad infantil más alta y donde para sobrevivir se precisan 1,90 euros por día.
Será un duelo entre las estrellas de la NBA y los deportistas que se autodenominaron como "un grupo de refugiados que se reúnen durante unas semanas al año e intentan dar lo mejor de sí mismos para luego desafiar a los más fuertes del mundo".
Lebron James, Kevin Durant y Stephen Curry lideran al "Dream Team", que venció por 110-84 a Serbia en su debut en París 2024, donde busca su decimoséptima medalla dorada, la quinta consecutiva.
A su vez, Sudán del Sur es un país que ni siquiera existía en 2011, un año antes de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, en cuya final el representativo de Estados Unidos venció a España.
"Hace un año nos entrenábamos al aire libre, en campos inundados o con las águilas sobrevolándonos amenazadoramente", relató el DT Royal Ivey, quien jugó en la NBA y fue compañero de Kevin Durant en la universidad de Texas.
Ivey asumió en reemplazo de Jerry Steele, entrenador del "college" que luego se convirtió en una especie de "predicador" que intenta promover el básquet en los países menos afortunados y en el pasado trabajó también en Irak y Siria y dirigió a la selección de Palestina.
Steele es uno de los responsables de la presencia de Sudán del Sur en París 2024 al igual que Luol Deng, ex jugador de los Chicago Bulls, Miami Heats y Los Angeles Lakers y protagonista de dos ediciones del "All Star Game" que fundó la Federación de Básquet del país del cual huyó de niño y desde 2020 financia el proyecto de básquet de esa nación.
"Paga todo él: gimnasios, comidas, pasajes aéreos", confirmó Ivey sobre Deng.
Ivey aseguró luego que la selección de Sudán del Sur, que en París 2024 debutó con un triunfo por 90-79 ante Puerto Rico, es su "rayo de luz".
El combinado de Sudán del Sur corrió riesgo de no poder clasificarse a París 2024, pues todos sus integrantes contrajeron Covid durante el torneo africano que otorgaba el boleto a los Juegos Olímpicos, pero se vio beneficiado por el retiro de Argelia.
La selección de Sudán del Sur, que representa a "un país que mucha gente ni siquiera sabe de su existencia", según Wenyen Gabriel, que volvió a su casa tras una experiencia en el Maccabi Tel Aviv, jugó el Mundial y venció a Angola para sellar su boleto olímpico como el mejor combinado africano.
La experiencia en París 2024 comenzó con el pie derecho pese a que antes del partido se reprodujo un himno equivocado, pues se escucharon las estrofas de la canción nacional de Sudán.
Ante el seleccionado estadounidense, Gabriel jugará con Carlik Jones, otro ex NBA nacido en Ohio pero con orígenes en Sudán del Sur que pasó por Dallas Mavericks y Chicago Bulls antes de firmar para Partizán Belgrado.
El resto del equipo de Sudán del Sur milita en clubes de China, Uganda y Australia, donde se sumaron la experiencia necesaria para mantener con vida el sueño olímpico.
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