Egonu habló en el podcast "BSMT" de Gianluca Gazzoli, un espacio dedicado a "charlar sobre actualidad, deporte, música, entretenimiento, ciencia, filosofía, emprendimiento y mucho más", según explicó su creador.
La voleibolista de 25 años, hija de padres nigerianos y figura de la selección italiana, contó el momento desagradable que vivió cuando amenazó con renunciar a la "azzurra" tras el duelo por el tercer puesto del Mundial de 2022.
"Me preguntaron porqué soy italiana, éste es mi último partido con Italia", declaró Egonu al término de ese compromiso, aunque meses después volvió sobre sus pasos y se reincorporó a la "azzurra".
"Había personas inteligentes, que vivieron lo mismo y saben que es algo que existe. Pero otras personas lo negaban, se volvieron contra mí y se quejaron diciendo 'te recibimos en nuestro país, te convertiste en lo que eres gracias a nosotros y ahora te vuelves contra nosotros'", recordó Egonu.
Pero la opuesta del club Italy explicó que tomó aquella decisión tras reflexionarlo detenidamente: "no fue un arrebato, fue hablar de ello y en cierto momento se convirtió en el único tema que querían discutir conmigo", lamentó.
"No estaba expresando mi opinión y no podía ser portavoz de aquellos que experimentaron lo mismo que mi familia y yo. No quería crear un problema o una reacción mediática tan fuerte.
Sólo quería decir la verdad, algo que todavía sucede hoy", cuestionó Egonu.
Luego de aquella decisión, la voleibolista nacida en Cittadella, Véneto, aceptó la invitación para participar del Festival San Remo, donde intentó mostrarse como una conductora "empática, sonriente, alegre".
"Gracias a San Remo puedo explicar que amo a mi país, que juego para mi país, que vivo en Italia y amo su cultura. Pero no oculto el hecho de que exista esta parte negativa", insistió sobre el racismo.
"La mía es una forma de eliminar esta parte y el sufrimiento de otros niños y familias simplemente por el color de su piel", remarcó Egonu, quien añadió que "no me discriminan a mí, sino a mi familia y a otras muchachas que juegan al vóley y escuchan comentarios".
"No lo hago por mí, sino por las demás personas que viven todo esto. Pueden ser los sonidos de tus padres u otras personas mientras estás en el campo, y no es agradable", aseveró Egonu.
"Cuando entras en una tienda, inmediatamente te ven y te controlan con esnobismo ante tus narices. Hay muchas situaciones y dinámicas que eventualmente notas y a las que prestas atención. A mí no me pasa, me pasó en el pasado y ahora ya no lo noto. Trabajé en ello, sucede más fuera del campo que dentro", precisó.
Consultada sobre los atletas que hicieron detener un partido tras escuchar insultos racistas, Egonu respondió: "el jugador que sufre esto es una persona, tiene emociones, y entonces reacciona", comprendió.
"Puede lograr controlarse en ese momento, pero duele. No es algo que puedes controlar siempre. Mis padres me prepararon para esto, me decían que siempre fuera la mejor y sea educada, nunca fuera de lugar", concluyó Egonu.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA