El monegasco Charles Leclerc estableció hoy el mejor tiempo en las pruebas libres del Gran Premio de Australia, en las que el retornado español Carlos Sainz finalizó tercero, con el tricampeón mundial neerlandés Max Verstappen ubicado entre las dos Ferrari.
"Estamos mejor que en las primeras dos carreras del año, pero creo que Red Bull no expresó su verdadero potencial", afirmó Leclerc, quien con un giro de 1'17"277 precedió por 381 milésimas al líder del campeonato y ganador en Bahrein y Arabia Saudita.
"El paso de carrera es bueno y tenemos una buena oportunidad de lograr la pole", admitió pese a todo el monegasco, que marcha tercero con 28 puntos en el Mundial tras su cuarto puesto en Sakhir y el tercero logrado en Jeda.
"Creo que Red Bull no giró a fondo y siento que sigue estando por delante de nosotros", comentó cauteloso al destacar que "muchos giraron con demasiados coches en pista, mientras que nosotros lo hicimos con menos tránsito".
"Resulta difícil pronosticar cómo estamos respecto del resto, pero en líneas generales todo parece estar bien y si bien es apenas el inicio del fin de semana, siempre es mejor comenzar así", completó Leclerc.
El monegasco había terminado cuarto en la primera sesión, a 35 milésimas de segundo del mejor tiempo que en esa tanda lo estableció el británico Lando Norris con McLaren, al girar en 1'18"564.
También en esa sesión Verstappen finalizó con el segundo crono en pista, a 18 milésimas del mejor tiempo y por delante de la Mercedes del británico George Russell, que se ubicó a 33 milésimas de distancia de su compatriota con su Mercedes.
En esa manga, Sainz cerró a 122 milésimas con el octavo tiempo en su regreso a las pistas tras haber estado ausente en Arabia Saudita debido a una intervención de emergencia a la que se sometió por un cuadro de apendicitis.
En la previa del inicio de las acciones, el español advertía que no había tenido mucho tiempo para recuperarse y que lo más importante para él era no sentir dolor al conducir.
"Las últimas dos semanas no han sido fáciles y por eso hoy estoy contento de haber podido completar las dos sesiones sin problemas", resumió el piloto de Ferrari, que en la segunda tanda se ubicó a 430 milésimas de su compañero de equipo en la mejor de sus 25 vueltas al trazado.
"Ahora, me concentraré en progresar paso a paso para llegar del mejor modo posible a la clasificación y al Gran Premio. La máquina funciona bien y trataré de sacarle el máximo provecho a ella y a mi físico", completó.
Ferrari, como anticipaba el jefe del equipo italiano, Frederic Vasseur, salió a presionar a Red Bull desde el inicio de las acciones en el Albert Park de Melbourne y mañana irá por más.
Verstappen intentará impedírselo y saldrá en busca de la tercera pole del año, la trigésimo quinta en la Fórmula 1, para partir en punta en Australia como hace un año antes de cantar victoria en carrera.
Su compañero mexicano Sergio Pérez, hoy con el octavo tiempo, a 813 milésimas de Leclerc tras haber cerrado sexto en la sesión inicial.
En esa tanda, Pérez se ubicó a 78 milésimas de distancia de un Norris al que precedió por la tarde, ubicándose entre los dos pilotos de McLaren, por detrás del australiano Oscar Piastri.
Detrás de Sainz, en tanto, se encolumnaron los pilotos de Aston Martin: el canadiense Lance Stroll, que cerró a 545 milésimas del mejor tiempo, y el bicampeón mundial español Fernando Alonso, que lo hizo a 635 milésimas y se ubicó quinto.
Sexto quedó Russell, a 674 milésimas del mejor crono y 12 puestos por delante de su compañero y compatriota Lewis Hamilton, quien completó 23 vueltas en la segunda sesión y cerró a 1"557 de Leclerc en el decimoctavo lugar (había sido noveno en la primera).
El séptuple campeón mundial, ganador en Australia en 2008 con McLaren y en 2015 con Mercedes, pareció padecer hoy al volante de la W15, sobre todo en la zona de chicanas del circuito.
Amén de lo sucedido en pista, también sigue la "acción" tras bambalinas con nuevos detalles del escándalo que salpicó al jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, "indultado" en su momento luego de una investigación independiente ordenada por su supuesto "comportamiento inapropiado" hacia una empleada.
A pesar de su "absolución", la prensa británica volvió hoy a la carga al publicar que la esposa del directivo, la ex "Spice Girl" Geri Halliwell, le exigió a su marido que le mostrase todos los mensajes de su teléfono celular, reclamo al que Horner accedió para salvar su matrimonio.
Seguramente no tendría nada que esconder, como sí pareció esconder Red Bull hoy durante las pruebas libres en Australia, guardándose quizás lo mejor para la clasificación de este sábado, en la que Ferrari promete meterle presión, tanto como Halliwell a Horner.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA