Roma tropezó antes del derby

Perdió y cedió la cima del Grupo G en la Europa League

Roma cayó en Praga y cedió el liderazgo (foto: ANSA)
Roma cayó en Praga y cedió el liderazgo (foto: ANSA)

    (ANSA) - PRAGA, 9 NOV - Roma dejó pasar hoy la oportunidad de asegurar el pasaje anticipado a los octavos de final de la Europa League y, además, con su derrota por 2-0 en campo de Slavia Praga resignó la puinta del Grupo G a manos del equipo checo, justo en la previa del derby que animará el domingo con Lazio por el campeonato italiano.
    "El resultado es merecidísimo tanto para ellos, como para nosotros", resumió el entrenador portugués José Mourinho, quien fiel a su estilo no se guardó nada y tras el partido reconoció: "No me gustó nada de lo que hicimos hoy y ya lo conversé con los jugadores, algo que habitualmente no suelo hacer, pero que obviamente no voy a comentar".
    "Nos faltó todo, pero no quiero ahondar en esto y tampoco lo harán los jugadores, que no hablarán con la prensa por decisión mía. Sé que lo hizo el 'Gallo' (Andrea Belotti, Ndr), pero porque lo entrevistaron apenas finalizó el partido al borde del campo de juego, pero nadie más debe hablar porque no hay mucho más que agregar a lo que yo ya dije", completó el "Special One".
    El fastidio de Mourinho resultaba por demás evidente tras un partido que Slavia Praga resolvió el complemento con goles de Vaclav Jurecka a los 50' y de Lukas Masopust a los 74', gracias a los cuales los entrenados por Jindrich Trpisovsky escalaron a la cima con diez nueve unidades, las mismas que la Roma, pero con mejor diferencia de goles (ocho contra cinco) y cuatro por delante del Servette, que sumó la primera al derrotar por 2-1 a Sheriff Tiraspol, que cierra con un punto.
    Roma, que contó con el delantero belga Romelu Lukaku desde el inicio y con el argentino Paulo Dybala desde los 68' (reemplazó a Belotti), así como con su compatriota Leandro Paredes hasta los 84', tropezó cuando menos se lo esperaba y sufrió su primera derrota en el torneo luego de tres triunfos consecutivos que parecían encaminarla hacia una clasificación anticipada.
    Por el contrario, Slavia Praga incrementó sus opciones y vengó aquella derrota previa por idéntico marcador en el Olímpico, reabriendo la pelea por el pasaje directo a los octavos en un partido en el que la Roma no mostró la determinación necesaria par salir a ganar el partido ante un rival que sí salió decidido a llevársela por delante desde el primer minuto.
    Mourinho seguramente tomó nota desde la "tranquilidad" del palco, pues hoy cumplió con la última de las cuatro fechas de suspensión que le aplicaron por insultar al árbitro inglés Antonhy Taylor.
    El equipo "giallorosso" lució demasiado timorato como para llevarse los tres puntos y apostó al contragolpe ante un Slavia Praga que tuvo mayor control del balón y atacó más, planteo que rindió frutos en el segundo capítulo cuando finalmente logró establecer diferencias en el marcador ante una Roma replegada que prácticamente no llegó al arco rival.
    El arquero belga de ascendencia serbia Mile Svilar, titular hoy en la valla del equipo italiano, no logró retener el balón tras un cabezazo de Lukas Provod y Mojmir Chytil lo recuperó para habilitar a Jurecka, quien a metros del arco estableció el 1-0 parcial en favor del local.
    Un gol que pareció despertar de su letargo a la Roma, que dos minutos después llegó por primera vez con peligro por intermedio de Belotti y que luego contó con otra chance como para igualar a través del turco Mehmet Zeki Celik, quien en lugar de habilitar a Lukaku optó por rematar débil y desperdició una buena oportunidad.
    Provod también tuvo una chance para estirar la ventaja, pero esta vez chocó con un seguro Svilar, tras lo cual el ingreso de Dybala pareció empujar al visitante en busca de la igualdad, objetivo que perseguía cuando Masopust aprovechó el adelantamiento del rival en cancha para recibir libre al borde del área y someter al arquero con un violento derechazo.
    Roma intentó reaccionar a puro instinto, pero sin claridad, como la que hoy le faltó a Lukaku, que vio interrumpida así su racha consecutiva de goles en los últimos 14 partidos de la Europa League, y también a Dybala, que no siempre puede hacer milagros como el que hoy necesitaba su equipo para torcer el rumbo de un partido que desde hacía rato parecía sentenciado.
    "Esta tarde jugamos por debajo de nuestro nivel, como seguramente se vio, y por eso resignamos el liderazgo en el grupo. Nos faltó claridad porque creo que físicamente estuvimos en partido hasta el final, aunque pudimos haberlo hecho mejor", reconoció Belotti, quien pidió concentrarse ahora en el clásico con Lazio, que llega entonado por su victoria en Champions frente al Feyenoord y con dos días más de descanso. (ANSA).